Maite SOROA
No mejoran, los pobres
Ya les advertí en días pasados que los de la derechona montaraz están furiosos. Ayer, repasando las páginas de «Libertad Digital», el diario de internet del radiopredicador Jiménez Lozanitos, dí con una perla firmada por Isabel Durán que acredita lo anterior.
Según la autora «Zapatero ya no engaña a nadie. Y no sólo por las desacreditadas encuestas del CIS que revelan la espectacular caída libre de su imagen y la de todo su Gabinete, sino por el reguero de destrozos y averías que hacen tambalear su gestión y su credibilidad, minada por las sucesivas traiciones, incluso a sus propios socios». ¡Que se lo pregunten a los catalanes!
Pero no es eso lo que pretende demostrar la autora, sino algo más sibilino, el pacto ilegítimo, la componenda traidora de mister Z: «De nuevo, el presidente del Gobierno ha anunciado su compromiso para no incluir el terrorismo en la campaña electoral y repite cual disco rayado la petición de `pasar página' del 11-M. Zapatero no quiere que nadie recuerde a De Juana entrando victorioso en el hospital donde murió asesinado Miguel Angel Blanco. Afortunadamente este fin de semana una nueva macromanifestación de víctimas del terrorismo ha dado un nuevo ejemplo de civismo y democracia que deja en evidencia al Gobierno del juego sucio, la traición y la ruptura de las reglas de juego». Ya se ve la patita.
Según Durán, Mr. Z «debería ilegalizar ANV, el PCTV o cualquiera de las marcas que la propia ETA diseña -en connivencia incluso con los socialistas- para colar en las instituciones. Debería hacerlo, pero no puede. En lugar de ilegalizar ANV, el Ejecutivo se regodea con la posibilidad de sentar en el banquillo al presidente de la AVT al tiempo que estrangula su financiación reduciéndola a la misma cantidad que la minoritaria de Pilar Manjón mientras que gracias a él, el Ayuntamiento de Elorrio, gobernado por los proetarras, dedica 400.000 euros para a subvencionar las visitas, gastos de teléfono y las compras de zapatos o revistas de ocho terroristas» ¡Lo mezclan todo!
Y, al final, el dislate: «En el País Vasco y en Navarra no sólo no hay libertad sino que ser terrorista, gracias a Zapatero, confiere un plus de legitimidad. Todos saben ya que, a partir de ahora, lo que queda por venir son más escaños para la ETA con el silencio de Z». Están como higos.