El presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, manifestó ayer en una conversación informal con periodistas que «de momento» no tiene intención de reunirse con Iñigo Urkullu. Además, señaló que la intención del nuevo presidente del EBB de reunirse con todos los partidos, incluida la izquierda abertzale, debe entenderse en clave electoral.

La iniciativa de Urkullu de abrir una ronda de conversaciones primero con partidos y después con agentes sociales ha causado cierto revuelo en las filas del PSOE y del PP. Pero, pese a las afirmaciones de éstos, el dirigente jeltzale aún no ha concretado sus intenciones. Ayer afirmó que tiene previsto mantener encuentros con líderes que representan a la sociedad vasca para avanzar hacia la normalización, y ello incluye «la sensibilidad ideológica que representa la izquierda radical abertzale», aunque no determinó si sería «en público o en privado». Tampoco está claro si hablará con Batasuna o intentará hacerlo con el grupo parlamentario Ezker Abertzalea.

En cuanto a las declaraciones del presidente del Gobierno español sobre recibirlo en la Moncloa, tampoco consta que Iñigo Urkullu le haya pedido ninguna cita.

Imaz accedió a la presidencia del EBB en enero de 2004 y Zapatero, en abril de ese año. Su primera reunión oficial en la Moncloa fue en setiembre y luego mantuvieron otras dos.