Mientras en Gipuzkoa se ha firmado el convenio del Metal, en Bizkaia la negociación se encuentra bloqueada y en Araba CCOO y UGT han planteado un preacuerdo con la patronal, ahora le toca el turno al proceso negociador del convenio del Metal de Nafarroa, que arrancará en los próximos días.

Este convenio afecta directamente a 22.000 trabajadores y de forma indirecta a otros 12.000 que, aunque cuentan con pactos y convenios propios, algunas de sus condiciones laborales están determinadas por el convenio provincial. El vigente en la actualidad se firmó para los años 2004 a 2007.

LAB, que ha elaborado ya su plataforma, recordó que el índice de eventualidad en el sector alcanza el 33% y subrayó la elevada contratación a través de Empresas de Trabajo Temporal.

El sindicato abertzale aprobó los contenidos de su propuesta en una asamblea de delegados que analizó la situación del sector y de la que dedujo que «tiene que darse un salto cualitativo que suponga dignificar las condiciones de vida y trabajo de los afectados por el mismo».

Por ello, señaló como una de las prioridades la creación de empleo estable y de calidad, con la inclusión de medidas como la negativa a subcontratar trabajos propios, la eliminación de ETT y horas extraordinarias y la limitación de la contratación eventual al 10% como máximo.

También insistirá en la defensa de la subrogación ligada al producto y en la reivindicación salarial con el fin de «sacar del agujero al grueso de afectados por el convenio con sueldos que rozan los mil euros mensuales». En cuanto a la reducción de jornada, una de las principales reticencias de la patronal, reclamará el recorte de 16 horas de las actuales 1.707 anuales.

Asimismo, plantea la eliminación de fórmulas de flexibilidad como bolsas de horas, cambios de turnos y jornadas irregulares. A todo ello, el sindicato abertzale añade otras demandas, como la jubilación parcial, la ampliación de permisos retribuidos, la gestión pública de las bajas, el complemento salarial de las mismas hasta el 100% y la mejora de las medidas de conciliación familiar.

Implicar a todo el sector

LAB estima imprescindible la suma de fuerzas para afrontar una negociación con garantías, «sobre todo en temas tan importantes como la subrogación». Del mismo modo anunció su empeño en que todos los trabajadores del sector se impliquen en la negociación del convenio «independiente de que existan empresas con convenio propio ya que no sólo afecta a 22.000 trabajadores directamente sino que se convierte en clara referencia para la negociación en sus empresas, para los 12.000 con convenio propio.