Reunión en Durango de experimentados músicos en el directo arte del punk-rock. Un cartel flamígero propio de los días en los que el punk recorría Euskal Herria todos los fines de semana. De un lado Piperrak, formación navarra que lidera la noche con el objetivo de grabar un DVD en directo que testimonie un viejo repertorio cubierto por canciones punk que han conectado espectacularmente a dos o tres generaciones, que en esto de la edad musical los bloques van más por hermanos que por padres e hijos.

Piperrak se formaron en 1990 a medio camino entre Errioxa y Nafarroa. En el inicio, la banda estuvo integrada por Txitxarro, bajo y voces; Josetxu, voz principal; Rufo, batería, y Fermín, guitarra. Con esta formación grabaron dos maquetas, «Ahórkate», del mismo 1990 y «La Ribera Rock & Roll», grabada dos años más tarde y que es la cinta que les reviertió cierta popularidad.

Tras dos años de abundantes conciertos, de retomar el punk-rock que otras formaciones más veteranas iban dejando por inanición o destrozo, Piperrak contaron con la oportunidad de grabar su primer álbum, «Arde Ribera», publicado por Discos Suicidas, aún con un catálogo vivo y dinámico. El disco contiene temas tan emblemáticos como «Cualquier día», «Mi primer amor» o la versión de Snuff que ellos titulan «Iruñea 6 de julio», todo un alboroto en directo. El punk-rock de turuta, los himnos directos y las letras joviales son las claves del sonido Piperrak. Eran las noches en las que Txitxarro, bajista encrestado, repasaba con su bajo el repertorio de bandas como Eskorbuto o La Polla, mientras que el público cantaba vocacionalmente todo lo que proponía el carismático personaje, siempre con el bajo próximo a sus rodillas y la mirada perdida en el más allá.

En 1996, apareció «Los muertos de siempre», también editado por Discos Suicidas y producido, mayor presupuesto y apuesta, por Fernando Madina (Reincidentes). El disco mantiene las constantes del cuarteto, el viejo punk vasco, el más clásico, y armonías que recuerdan a Bad Religión, formación californiana que comienza a calar profundamente en un amplio sector punk. En 1997, Fermín decidió dejar la banda y fue sustituido por Javi. Un año después se disolvieron sin previo aviso.

En 2006, Hatortxu Rock comenzaba a perfilar su concierto anual, en esta ocasión en Berriobeiti. Como uno de lo ejes de la nueva edición barajaron el regreso a escena de Piperrak. Si su poder de convocatoria continuaría vigente, resultaba una incógnita. Pero llegado el día, Piperrak demostraron que su huella había sido profunda a pesar de contar con un repertorio ligero y sin alardes instrumentales, pura eficacia. Piperrak regresaron con la misma formación, repertorio, técnico de sonido, mánager y responsable de logística.

Su vuelta no pasó inadvertida, por lo que fueron invitados a los principales festivales urbanos: Derramerock, Petróleo, Lumbreras, Vilarock, Extremúsica... y numerosas fiestas locales.

Finalmente, este sábado 19 los navarros pondrán fin a su nueva gira con la grabación de un DVD y cedé, más la compañía de tres espléndidas bandas: los Segismundo, Kabezabolo, que es actualidad estos días por la edición de un DVD, y los Lendakaris, que se encuentran concluyendo su nuevo disco.