Los encuentros en Ipurua entre la SD Eibar y el Sporting de Gijón llevan camino de convertirse en clásicos. La entidad asturiana suele movilizar una flota de aficionados y en el año 2004 los 4.000 espectadores gijoneses provocaron altercados que siguen dando que hablar.

Por ello, el encuentro del domingo al mediodía será declarado de alto riesgo. Además, el club armero se ha querido curar en salud y ha elevado el precio a los seguidores del Sporting a 40 ¤ a modo de «medida disuasoria», según las palabras de Jaime Barriuso, presidente de la entidad eibarresa.

«Este precio sí tiene algo de disuasorio, porque si nos vienen 4.000 personas podemos armar otra alteración del orden público. Todos sabemos lo apasionados que son los de Gijón y no queremos otro jaleo», señaló.

Sobre el balance de la primera vuelta, el máximo dirigente se mostró prudente. «El balance es positivo, pero nos faltan 21 puntos para llegar a los 50 puntos para sellar la permanencia».

Ante la opción de fichar en invierno, Barriuso dijo que «podríamos reforzarnos con un lateral izquierdo y un delantero, pero si no viniese nadie, no pasaría nada».