Los análisis han confirmado que la vecina de Irunberri ingresada en un hospital de Iruñea padece meningitis de tipo B, según informó ayer la consejera de Salud del Gobierno de Nafarroa, María Kutz, quien indicó que el entorno de Irunberri se encuentra en situación de «vigilancia epidemiológica extrema».

Con éste son cuatro los casos detectados en los últimos 15 días, con una joven fallecida por la enfermedad de tipo B, para el que no existe vacuna. El hecho de que el último de los casos se notificara el pasado 14 de enero hace que todavía se esté dentro del periodo de incubación, que es de diez días, por lo que, según precisó Kutz, su Departamento ha establecido «la situación de vigilancia epidemiológica extrema» en ese área.

Esto significa, según explicó, que los epidemiólogos del instituto de Salud Pública están «en permanente contacto con todos los centros de salud de la zona básica para contestar a las dudas que pueda tener la población». Al mismo tiempo la consejera comunicó la evolución favorable tanto de la mujer de 55 años ingresada en Iruñea como del joven que se encuentra en el Hospital Donostia, después de haber permanecido en Irunberri los días 5 y 6 de enero. El primero de los afectados, un joven de esa localidad, ya ha sido dado de alta.

Otro caso en Oibar, vírico

Por otra parte, a un niño de once años procedente de Oibar le ha sido diagnosticado en el Hospital Virgen del Camino meningitis vírica, sin «ningún vínculo» con los cuatro casos de meningitis meningocócica. El Departamento de Salud confirmó en una nota que el diagnóstico clínico y la bioquímica del líquido encefaloraquídeo del niño indican que se trata de una meningitis vírica.

Tal y como había adelantado la consejera María Kutz, el nuevo diagnóstico no cambia «nada las actuaciones preventivas que se están llevando a cabo». En todos los casos se ha actuado en el entorno de los pacientes con la administración de quimioprofilaxis a familiares y personas con quienes hayan convivido. Al respecto, Kutz insistió en que esta práctica sólo se recomienda para las personas con contacto prolongado con los afectados, no para el resto de la población de la zona.