Pese a que se quiere pasar página cuanto antes, lo ocurrido en el Sánchez Pizjuán fue lo suficientemente fuerte como para que todavía siga coleando en Tajonar. Ambos sentimientos encontrados se fundieron ayer en las declaraciones de uno de los capitanes rojillos, César Krutxaga, que se perfila como titular ante el Barcelona a la vista de la ausencia por sanción de Josetxo.

El de Ezkaroze prefirió extraer las consecuencias positivas del enfrentamiento con los hispalenses. «El equipo, técnicos y afición han salido fortalecidos. Los hinchas porque se vuelcan mucho más con nosotros al ver una injusticia y el vestuario porque un robo de este tipo hace que nos unamos mucho más. A la gente le ha gustado observar cómo Ziganda y Goiko han defendido a muerte los colores rojillos», explicó.

El central osasunista, quien comentó con sorna que «el año que viene les volveremos a ver por aquí y será otra historia también bonita», refrendó las decisiones adoptadas por el Comité de Competición el pasado martes, en las que castigó con un partido al técnico de Larraintzar -misma sanción para Adriano- y perdonó la segunda amarilla a Javi García.

«A todos nos va a servir para aprender un poco, a Iturralde le habrá venido bien para futuras ocasiones y a nosotros también en ciertas cosas que deberíamos aprender. En concreto, el esperar que el Sevilla en el minuto 90 nos devolviese el balón es algo que, desde luego, no teníamos que haber pensado», advirtió de cara a próximos compro- misos.

A partir de aquí, borrón y cuenta nueva para Krutxaga. «Llevamos muchos días con esto y la vida sigue. Hay que empezar a hablar del Barcelona porque los tres puntos del sábado pasado ya no van a volver por mucho ruido que metamos, lo que hay que hacer es intentar sacarlos en el Camp Nou», aceptó.

De hecho, el zaraitzuarra tendrá la oportunidad de colaborar en tan magna hazaña, dado que sólo el Real Madrid ha conseguido puntuar -ganó 0-1- en el estadio catalán. Aunque le hubiera gustado regresar por «méritos propios» en lugar de hacerlo por la sanción a Josetxo, reconoció tener ganas de volver al once, tras haber salido de él tras varios choques seguidos.

En su opinión, Osasuna deberá estar «muy concentrado», con una disposición en el campo en la que «cuando ataquemos lo hagamos todos, lo mismo para defender», y con la idea clara de «no regalar la pelota e intentar tenerla más que en otros envites». «El patrón de partido contra el Barça no va a ser como el del Athletic o el Sevilla porque el campo es muy grande y el rival mueve el esférico muy deprisa. Tienen mucha calidad, hay menos encontronazos y el aspecto físico no prevalece sobre el técnico», distinguió.

Partidillo contra el Promesas

La sesión de ayer no clarificó -ni siquiera apuntó- cuáles pueden ser los elegidos para enfrentarse de inicio a los hombres de Rijkaard. Parece más probable que sea en la jornada de hoy cuando Ziganda ofrezca mayores pistas, dado que habrá un partidillo con el Promesas en El Sadar, precisamente el mismo recinto donde este domingo -16.00- el equipo filial se medirá en otro derbi de canteranos a la Real B.

Tanto Plasil -baja segura- como Pandiani, al que se irá evaluando a lo largo de la semana, no se ejercitaron con el resto del grupo y sí con el readaptador físico, Josu Sesma.