Sola cumplió ayer 22 años, justo el día después de consagrarse en El Sadar
Celebración por partida doble
Con prudencia y humildad, el jugador optó por reconocer que «no he hecho nada, sólo ha sido un partido y no hay que volverse locos»
Natxo MATXIN | IRUÑEA
Ayer cumplió 22 años y Kike Sola lo celebró por partida doble. Además de su aniversario, el de Cascante festejó encontrarse en su mejor momento deportivo, con gol incluido en su debut como titular en El Sadar y una jugada brillante con asistencia final en el que cerró la cuenta y certificó la tercera victoria consecutiva casera de su equipo.
Sin euforias y con los pies en el suelo, el jugador ribero sabe que la clave para seguir estando enfrente de la portería rival es el trabajo. «Trato de ganarme la titularidad cada semana en los entrenamientos, pero sólo ha sido un partido y no hay que volverse locos. No he hecho nada y me queda mucho por aprender, para eso tengo en el vestuario a los veteranos, que me ayudan mucho», explicó con modestia.
Sudor y actitud positiva son las claves del fulgurante éxito de un deportista que, tras un paso frustrante por las categorías inferiores del Athletic, fue recuperado para el fútbol de elite de la mano del que ahora es su técnico. «Hay que confiar en ti mismo y mirar hacia adelante, trabajar día a día, nunca confor- marse y ser optimista», enumeró Sola.
Aunque todo ello no sirve de nada si no se está físicamente bien. Afortunadamente, el delantero pudo recuperarse a lo largo de la semana de unos problemas en el tobillo gracias al equipo médico del club, a quienes dedicó su gol. Con un gesto que simbolizaba una especie de cruz -en referencia a un gesto sanitario internacional como es la Cruz Roja- y un cuatro -Patxi Zipriain, Manu Pérez Etxarri, Pedro del Villar y Josu Basabe-, el jugador quiso reconocerles la labor que habían desarrollado con él a lo largo de estos días. «No era fácil de simbolizar, pero se lo dedico porque han estado muy `pesados' con el tobillo y se han portado muy bien conmigo», explicó.
Confianza de los técnicos
Puestos a elegir entre el gol del domingo y con el que se estrenó en Primera División -anotó dos en el Ruiz de Lopera la campaña pasada-, Sola se queda con el primero que consiguió ante el Betis «porque, pese a que el de ayer fue muy importante y que en Sevilla el año pasado ya íbamos ganando, el primero que metí ante los béticos nunca se me olvidará, fue el debut soñado y se queda para mis adentros», confesó sincero.
Con sus buenas actuaciones y su segundo gol en Liga, el cascantino está devolviendo la confianza que el cuadro técnico depositó en él cuando no le dejó marcharse en el mercado de invierno, pese a las ofertas que había de clubes de Segunda para hacerse con su cesión.
«Les estoy muy agradecido por ese detalle, ya dije que prefería quedarme aquí y jugar cuatro partidos en Primera que hacerlo toda una segunda vuelta en otra categoría. Todo sueño de cualquier chavalín es formar parte de un equipo como Osasuna», indicó.
De «subidón» calificó Sola el hecho de que desde la grada corearan su nombre, tanto cuando metió el gol como cuando fue sustituido poco después de que realizara la jugada del partido antes de dar otra diana a Font.
El delantero ribero se mostró «convencido» de que la victoria ante el Atlético de Madrid «nos va a dar alas» para obtener algo positivo en la visita que deberá cursar el equipo a El Madrigal este domingo a partir de las 19.00.
Por méritos propios, Carlos Vela fue el otro joven protagonista del choque ante el Atlético, pese a no considerar que ése fuera su mejor partido desde que llegara a Osasuna, aunque sí reconociendo que «cuando metes un gol y das una asistencia para otro tampoco te puedes quejar, ojalá sean todos así».
El mexicano, que lleva jugando de manera ininterrumpida desde la quinta jornada, confesó que, pese a dicha continuidad, le quedan todavía muchas cosas por aprender, «o, de lo contrario, sería un fenómeno», comentó con ironía. «Voy creciendo apenas, cogiendo experiencia y eso todavía se nota en todos los aspectos del juego», añadió.
Pese a su reubicación en banda, al novel futbolista no se le han olvidado sus maneras de antiguo delantero a la hora de encarar portería. Ya suma su tercera diana y anuncia que habrá más, «cuando coja más confianza porque ahora me toca estar un poco más lejos de la portería, pero quiero estar ahí, llegando más», aseguró.
En cualquier caso, en lo único que piensa es en contribuir con sus actuaciones a mejorar el rendimiento del colectivo. Precisamente, el siguiente objetivo que tiene en mente es encadenar por primera vez en lo que va de temporada su segunda victoria consecutiva, «algo que necesitamos para salir de ahí abajo».
Enfrente se encontrarán con un difícil escollo, como es el Villarreal -sólo ha perdido en casa ante Real Madrid y Betis, aunque ha cedido cuatro empates-, aupado a la tercera plaza. Para Vela, todo ello puede ser incluso un estímulo añadido. «Jugar contra equipos grandes siempre te da un puntito más porque sabes que, con la calidad que tienes y si le ganas, siempre se acaba hablando más de nosotros».