En su lucha contra la imagen de que a estas elecciones sólo se presentan los partidos de Zapatero y Rajoy, en los últimos días los jeltzales andan sacando lustre a una anécdota que su portavoz en el Congreso, Josu Erkoreka, relataba el viernes en el «Diario de campaña» que mantiene en «Deia». Escribía el candidato que «hablando con un diputado catalán, me decía una cosa que me ha dejado preocupado. Este amigo me contaba que paseando por las calles de Barcelona le paró una señora. La mujer no tuvo reparo en confesarle que ella también era de CiU, a la vez que le expresó, casi en voz baja, una duda: Oye, ¿a quién hay que votar en estas elecciones, al PSOE o al PP? La mujer daba por hecho que CiU no participa en estos comicios, que sólo lo hacían PSOE y PP». Ayer la contó de nuevo el candidato alavés, Emilio Olabarria, en la tertulia matinal de Herri Irratia en el contexto de definir su posición contraria al debate entre dos candidatos a presidente del Gobierno que iba a celebrarse por la noche y que centró la atención informativa del día.

Todos los partidos excluidos del debate aprovecharon las horas previas al mismo para denunciar que este tipo de programas proyectan la imagen de que las elecciones son únicamente cosa de dos y desdibujan los perfiles del resto de las listas electorales. Los críticos recuerdan que estas no son unas elecciones presidenciales sino legislativas, por lo que no se elige directamente un presidente del gobierno, sino que éste saldrá de una votación que se dé en el Congreso de los Diputados, en la que pueden tener un poder determinante pequeñas formaciones que se ven excluidas de este modelo de debate.

Quien más lejos ha ido en su oposición ha sido Ezker Batua, cuyo candidato por Bizkaia, Jon Sustatxa, presentó una denuncia ante la Junta Electoral provincial de Bizkaia, en la que pedía que se prohibiera el debate, porque no respeta la pluralidad política y es «una mordaza para el resto de partidos».

La denuncia de Ezker Batua no tenía posibilidades de prosperar, por cuanto la Junta Electoral Central ya ha aprobado la celebración de debates cara a cara tanto para esta campaña electoral como en procesos electorales anteriores.

Además, en TVE ya está prevista la emisión de dos debates entre todos los partidos con grupo parlamentario propio en el Congreso. Una fórmula que, por otra parte, también deja fuera a aquellas formaciones con representación parlamentaria pero que carecen de grupo propio o a otras que carecen de representación, bien porque no consiguieron el número de votos suficiente o bien porque estos son los primeros comicios a los que se presenta.

Erkoreka habla de «fraude»

El cabeza de lista al Congreso del PNV por Bizkaia, Josu Erkoreka, denunció ayer el «fraude que supone al sistema electoral y al propio régimen político parlamentario» el debate a dos entre el candidato del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, y el del PP, Mariano Rajoy, así como «la polarización tan radical y exacerbada que se nos está presentando».

Erkoreka recordó que en un sistema como el americano, presidencialista, en el que hay unas elecciones presidenciales y dos candidatos a presidente, «un debate a dos tiene sentido». Sin embargo, precisó que el régimen constitucional español es parlamentario, y en unas elecciones generales lo que se eligen son diputados y senadores. «Lo que hay es candidatos a diputados y senadores de diferentes candidaturas pertenecientes cada una a un partido político. Reducir el debate a dos es adulterar el sistema político y defraudar el propio régimen político», criticó.

En este sentido, Erkoreka apuntó que el hecho de que dos partidos políticos «que son la quinta esencia del constitucionalismo, que se venden como los amantes y los grandes baluartes del modelo español y la Constitución, cometan un fraude de estas dimensiones, hay que denunciarlo».

Josu Erkoreka comentó que no tenía intención de ver el debate, lo que contrasta con una de las cuñas radiofónicas electorales del PNV. En el anuncio, se invita a seguir el debate y a comprobar que ni Rodríguez ni Rajoy abordan los problemas que afectan relamente a Euskal Herria y sus ciudadanos y ciudadanas, por lo que pide el voto para la candidatura jeltzale.

La candidata de Eusko Alkartasuna al Congreso por Gipuzkoa, Nekane Altzelai, también criticó la fórmula elegida para el debate, asegurando que no aportaría «nada nuevo» ya que «no refleja la pluralidad de la sociedad vasca».

En ese sentido, recordó que «en Euskal Herria somos siete partidos políticos quienes nos enfrentamos en estas elecciones» por lo que el cara a cara entre los dos partidos políticos mayoritarios en el ámbito estatal no recoge esta realidad.

Respecto al PP, dijo no esperar «nada» porque «nunca ha reconocido a Euskal Herria como sujeto político y, por tanto, no creo que hoy lo reconozca».

En cuanto a Zapatero, manifestó esperar «lo mismo, teniendo en cuenta las afirmaciones tan tajantes que está haciendo en esta campaña electoral». De este modo, se refirió al lema del PSOE «vivimos juntos, decidimos juntos» que, a su juicio, supone «no admitir a Euskal Herria como sujeto político».

EB lo asemeja a la ilegalización

El candidato de Ezker Batua por Bizkaia Jon Sustatxa, al tiempo que anunciaba la presentación de su denuncia ante la Junta Electoral provincial, afirmaba que «cercena los derechos del resto de formaciones políticas, la pluralidad política y la libertad de expresiones».

Sustatxa añadió que «se pueden ilegalizar, y de hecho se ilegalizan, ideas y partidos por medio de la Ley de Partidos, pero se ilegalizan de facto también impidiéndonos a muchas formaciones acceder a debates y a los medios de comunicación», reiteró. Esta situación, criticó, supone que se coarten derechos de 1,3 millones de ciudadanos que votan a Izquierda Unida.

Por su parte, el dirigente navarro de IU, Félix Taberna, como representante de esta coalición ante la Junta Electoral Central, pidió ayer a este órgano que los espacios promocionales que están emitiendo las televisiones sobre el debate que esta noche enfrentará a los candidatos del PSOE y del PP a la Presidencia del Gobierno se computen como publicidad electoral, al igual que los programas de análisis y valoración del debate que se hagan con posterioridad, y pide una compensación para Izquierda Unida.

La Junta Electoral remitió de inmediato esa demanda a las diversas cadenas de televisión para con el objetivo que las cadenas puedan presentar las alegaciones que estimen convenientes antes del mediodía del próximo miércoles. Una vez estudie estas alegaciones, el organismo tomará una decisión.