«Parece que fue ayer» suele ser la frase recurrente para explicar cómo pasa el tiempo entre nubes y sueñecitos; pero así es, pues al concurso Villa de Bilbao le han caído veinte años en un respiro y un «ahora vuelvo, que me salgo a tomar un cafelito», que en Bilborock no hay cafetería, como bien saben los miles de aficionados que se han pasado por el local en sus diez años de intenso funcionamiento.

Para la presente edición se han presentado más de 1.100 grupos, de los cuales han pasado a concurso, a la fase en directo, 33 en el caso de la sección pop-rock, doce en el apartado metálico y seis en nuevas tendencias. La final de metal tendrá lugar el 4 de junio y la de pop-rock, un día después.

Variedad estilística

El resumen de estilos se matiza rápidamente: de todo. Mezcolanza que al pop no le ha hecho daño, pues el público habitual del Villa es un aficionado con cuidada cultura musical que acepta con entusiasmo las heterogéneas ofertas. La situación, sin embargo, es algo más compleja en el lado metálico, pues las diferentes propuestas han dividido aún más las tribus, lo que repercute en una sección con más problemas para albergar aforos llamativos. Siempre se ha mantenido que el público jevi es fiel, pero lo es siempre que el estilo lo sea, por lo que, tras la remisión de salidas como el death, el thrash y el propio jevi, más la aparición de diferentes formas de metal contemporáneo y otros cruces, las fuerzas se han desparramado. Situación que indica que al seguidor metálico le pesan en exceso sus cerradas convicciones.

Quiénes son ellos

Ante el elevado número de grupos en esta fase y teniendo en cuenta que el metal no se inicia hasta el 9 de abril y nuevas tendencias el 22 de mayo, presentamos exclusivamente a las bandas vascas de pop-rock.

Es complejo situar y definir la propuesta musical de los bilbaínos Billy Bao. Trío que, entre ritmos abiertos, ruido modulado y cuerda maltratada, dan vida a su propuesta.

Dynamo nació en enero de 2007. Cuatro jóvenes de Getxo, ganadores de la edición número diecisiete del concurso Euskadi Gaztea, con base en el rock de los noventa, pasado por las texturas rítmicas de la actualidad.

Eureka Hot IV funden el soul añejo poco hecho de finales de los sesenta, el funk y el free jazz de los primeros setenta, más el viejo r'n'r y el ritmo y blues de los cincuenta. La banda se formó entre Bilbo y Bermeo, en febrero de 2005.

Entre la música de baile, el electro-pop y el amor por Kraftwerk se mueven los iruindarras Horthy, sexteto navarro con más de cinco años de existencia bordeando el pop y las nuevas tendencias. Sus componentes mantienen carreras en solitario.

También de la capital navarra, las Culebras es un cuarteto formado por tres chicas y un chico. Se formaron en 2005 con el hard rock como guía. Las Culebras acaban de editar su primer álbum, canciones guitarreras con melodías directas.

El trío bilbaíno Loan se formó en 2005. Bajo esencia noise-rock, la banda propone ambientes lisérgicos próximos a la sicodelia más densa y oscura.

Txarly Cuevas, ex La Casa Usher, es el hombre de negro de Los Carniceros del Norte, quienes bajo temática fílmica han editado «13 películas, 13 canciones». Disco entre el siniestro-pop de los primeros ochenta.

Mamba Beat es un grupo nacido en Bilbo en 2006, aunque cuenta con experimentados músicos de la escena bilbaina. Mezclan en su álbum-debut electro, house, acid-jazz, afrocuban-beat...

Los navarros Matti iniciaron su historia en 2004 y la consolidaron dos años después. Su primer álbum muestra a un grupo motivado por el pop bailable y la canción francesa sesentera.

Mirage se formó en Bilbo en 2006. Cuenta con integrantes que provienen de formaciones como Ximel o Fomalhaut. Mirage deciden girar el punto de mira y pasarse al post-rock instrumental.

Munlet es un dúo de Mendaro dinamizado por ritmos tecno, pop y rock. El sello barcelonés Transpop Records les editó el año pasado «Clínica de ruidos».

On Benito es un trío de Bera, liderado por Joseba Irazoki. Proponen trash, blues y viejo rock and roll. Canciones sencillas ambientadas en un pasado primitivo y audaz.

Simca son de Basauri y se formaro en el año 2000. Tras varios cambios de componentes, demos y nuevos puntos de vista, graban «Fenix», publicado por Fragment Records, donde suenan más rockeros y luminosos que en el pasado.

Tres chicos y dos chicas dan vida a los donostiarras Supertrooper, banda integrada por componentes que han pasado por formaciones como Underdogs, Brigada Slam o Elektrofreaks. No obstante, sus raíces emergen de Black Diamond, creado en 2003. El rock y las armonías vocales femeninas son la base de su sonoridad.

Sweet Oblivion es el proyecto de Alfonso Arana, compositor, vocal y guitarrista del desaparecido grupo Cujo, de amplio recorrido. Su primer álbum se titula «Wasted lovesongs», publicado por Noizpop Recordings, y donde se cruzan Bob Dylan, Neil Young y Tom Petty.

Trigger Travis nace en Gipuzkoa con el hardcore tintado de vieja escuela. Sus componentes provienen de bandas como Uncover the Fake, The New Mogambo Old School Stars, Toxika!, Ira et Decessus... Todas ellas del underground donostiarra. A primeros de 2008 editan su primer disco.

En total dieciséis formaciones vascas de un total de 33 seleccionadas en este apartado pop-rock. Si alguien falla en esta fase tocarán los gasteiztarras Arenna, con una buena demo debut publicada el año pasado. Como invitados por Bilbo, cualquier percance será cubierto por Póg Mo Thón, formación de Mungia.

La sección metálica comenzará el 9 de abril con Konter, de Bizkaia, e Irreverence abriendo fechas. Además se cuenta con los vascos Bioterror y Quaoar, ambos de Bizkaia, más Down of the Maya y Dead Means Nothing, ambos de Nafarroa y con sus respectivos álbumes debut, dos discos de envergadura.

Nuevas tendencias se ha reducido a dos días 22 y 29 de mayo. En este caso se cuenta con F. Carvalho y Backbone, de Bilbo, más Fairlight, de Gipuzkoa. La final de metal se realizará el 4 de junio y la de pop el 5. Cada una con tres bandas.