Los candidatos de diferentes cantones de la coalición Euskal Herria Bai manifestaron ayer en Baiona que son la «única alternativa contra la política ultraliberal y antisocial» de Nicolas Sarkozy, al que tildaron de «cínico, arrogante, desconsiderado e imbuido de poder».

Maduz Araguas pintó un retrato muy crítico de la actitud del presidente de la República y de la política que aplica respecto a la agricultura en Euskal Herria. Aseguró que «mientras la mayoría de la sociedad vasca apuesta por un proyecto de agricultura sostenible, que priorice el respeto a la naturaleza, los productos de calidad, la instalación de jóvenes agricultores y el respeto de los consumidores y de la población en general», Sarkozy hace gala de «un desprecio absoluto» hacia dicho proyecto y hacia quienes lo apoyan «como es nuestro caso», en referencia a EH Bai. La candidata por el cantón de Maule, recordando las palabras «insultantes y mentirosas» pronunciadas en Pau por Sarkozy, añadió que el objetivo es «romper la dinámica a favor de este tipo de agricultura que tanto apoyo tiene en nuestra sociedad», y aseveró que «no lo logrará».

Michel Mendiboure, por su parte, criticó «el fraude» que ha supuesto la aprobación del texto constitucional europeo en la Asamblea Nacional. El candidato por el cantón de Uztaritze le reprochó no haber tenido en cuenta el rechazo mayoritario plasmado en el referéndum y «haber copiado al 90%» el texto reprobado por la población.

Matizando que «un tratado o constitución es, al fin y al cabo, un contrato aceptado por todas las partes», expuso la necesidad de «tener un contrato simple, claro y solidario» en el que los representantes en las comisiones sean elegidos por la población «y no delegados impuestos por los estados»; en el que la Carta de Derechos Civiles y Fundamentales sea «progresista y no igualada al nivel más bajo poniendo en peligro los derechos adquiridos con tanto esfuerzo»; y que no ignore los derechos de los pueblos.

«Culpable potencial»

Mendiboure no obvió recordar la recién aprobada ley de retención de seguridad. Para EH Bai, esta ley «cuestiona un principio de más de 200 años por el que los ciudadanos son juzgados por sus hechos» y supone «un paso atrás enorme» en cuanto a las libertades individuales: «Con esta ley desaparece la presunción de inocencia del ciudadano, que se convierte en culpable potencial de un crimen virtual. Además, ¿quién sabe si mañana no puede ser aplicada a cualquier otro grupo o comunidad?», preguntó.

El capítulo sobre el «cinismo» de Sarkozy corrió a cargo de la candidata del cantón de Bidaxune. Rememoró que su primera medida nada más llegar al Elíseo fue «hacer un regalo fiscal a las clases más pudientes y aumentar sus propios emolumentos». Dominika Mendiboure observó que «mientras los bancos y grandes empresas realizan beneficios espectaculares, la precariedad va ganando terreno».

Para la candidata de EH Bai, Sarkozy está aplicando una «política ultraliberal y antisocial que pone en peligro los derechos sociales de los trabajadores y aumenta la marginación». Además, según Mendiboure, el presidente «desprecia a quienes más dificultades soportan tratándoles de vagos cuando la realidad es que cada vez hay más `pobres nuevos'».

La explicación del calificativo «cazador» la ofreció Karine Etchart, suplente del cantón de Biarritz-este. Se refería a la «caza de emigrantes» emprendida por Sarkozy y al tratamiento de «escoria que hay que limpiar con karcher» al referirse a los jóvenes de los barrios periféricos. Etchart presagió que en el futuro las expulsiones no cesarán «ya que su intención es seguir con esta `caza', para lo que construye centros de retención como el de Hendaia. Pretende romper la solidaridad y cualquier atisbo de justicia social», añadió.

EH Bai, la oposición «frontal»

Finalizando la comparecencia, Beñat Elizondo presentó a EH Bai como «la candidatura de oposición frontal a esta política y la opción para decir `no' a un proyecto como éste que localmente está siendo aplicada por los hoy candidatos de UMP y UDF-MoDem y por muchos otros que se esconden tras la denominación de `sin etiqueta' política». Consideró, asimismo, que EH Bai es la coalición que propone un programa de izquierda «más coherente», en alusión directa a los presentados por la «izquierda jacobina».

Insistió, en dirección de los votantes de los once cantones vascos que se renovarán el 9 y 16 de marzo, en que «el voto válido para decir no a la política de Sarkozy es EH Bai»: «Queremos dirigir un mensaje claro y positivo a los habitantes so- bre el reconocimiento de nuestro país y ofrecerles un proyec-to de sociedad basado en la justicia social».

Los candidatos de EH Bai declararon que nunca antes que en estos comicios «los abertzales se han presentado con tanta fortaleza» y subrayaron que la coalición es el resultado del trabajo realizado durante años por muchas generaciones. «Somos el eslabón de una cadena que refleja la lucha de quienes nos precedieron y demuestra que también habrá quienes continéen nuestro camino», recalcó Michel Mendiboure.