Representantes de LAB denunciaron ayer en la planta de Arcelor Mittal de Bergara el intento de la dirección de la multinacional siderúrgica de «ocultar bajas laborales» en los centros de Euskal Herria, de los que dependen alrededor de 6.000 empleos entre trabajadores director y de empresas auxiliares.

El acto coincidió con la celebración del segundo Día Mundial de la Seguridad y la Salud en las más de 700 plantas repartidas por el mundo y que agrupan a 310.000 trabajadores. El lema de la jornada para la consecución de «los cero accidentes» fue «juntos, un paso adelante». Según una nota informativa que repartió la empresa presidida por Lakshmi Mittal, que posee la cuarta fortuna a nivel mundial, «se trata de poner de manifiesto la importancia que conferimos a la seguridad y a la salud, potenciando la implicación de todos los trabajadores en la mejora de los datos relativos a la seguridad y estableciendo nuevos planes de seguridad más exigentes, tanto en el grupo como en cada planta, hasta llegar al objetivo final de cero incidentes y cero accidentes».

Ibon Zubiela, secretario de Salud Laboral de LAB, recordó que esta actuación de la multinacional siderúrgica tiene «más que ver con una actuación mediática que formal. Trata de lavarse la cara ante el problema». Para Zubiela lo importante, en este caso, es que en la diferentes plantas de la sideúrgica enclavadas en Euskal Herria «se están produciendo segundas actividades de trabajadores afectados por bajas o incapacidades después de sufrir accidentes de trabajo o algún tipo de enfermedad y se les dan permisos retribuidos a través de los servicios médicos con el único fin de reducir el absentismo laboral y equipararse a los objetivos que la multinacional acuerda en Luxemburgo».

La accción de LAB sirvió, un año más, para «desenmascarar a los responsables de la multinacional siderúrgica, porque no aplica la prevención y, en cambio, sí se molesta en realizar estas actuaciones irregulares».

Zubiela recordó a GARA que en varias ocasiones LAB ha denunciado «la ocultación y maquillaje de las bajas por accidente laboral», pero «Osalan, aunque ya nos ha reconocido que ese proceder es irregular por parte de la Acería Compacta de Bizkaia (ACB), sólo les advierte de esa situación», por lo que se pregunta «a qué espera Osalan para tomar cartas en este asunto. Luego nos dirá el consejero de Justicia, Empleo y Seguridad Social del Gobierno de Lakua, Joseba Azkarraga, que van a aumentar los subinspectores. Me pregunto para qué, si en estas actuaciones no se beneficia la seguridad y la salud de los trabajadores».

La realidad está demostrando que después de trece años de que se aprobara la legislación en materia de prevención de riesgos laborales, las empresas no actúan en esa línea y, sin embargo, sí se molestan en ocultar la falta de medidas de seguridad y salud laboral en los centros de trabajo. Así ocurre en Arcelor Mittal, a juicio de LAB. De hecho delegados sindicales de LAB en esos centros de trabajo dejaron ayer constancia a las puertas de las instalaciones de Bergara que Arcelor Mittal «lo que busca es aumentar la productividad, a través del incremento de los ritmos de trabajo. No se preocupa por las condiciones en que nos encontramos los trabajadores. Es la realidad que se percibe todos los días en las empresas de este grupo», expresaron.

Ibon Zubiela reconoció que en las diferentes plantas del grupo hay irregularidades. Así, recordó que en la planta de Etxebarri «el año pasado, más o menos, falleció un trabajador y, antes de levantar el cadáver, la dirección de la empresa reunió al comité de seguridad y salud para echar la culpa del accidente al trabajador. Ni a ESK ni a LAB nos convocaron a esa reunión». Sin embargo, el responsable de Salud Laboral de LAB reconoció que «interpusimos una denuncia en la Inspección de Trabajo y se demostró que el accidente ocurrió por la falta de medidas de prevención. Se le impuso un recargo de prestaciones por la falta de prevención. La empresa intentó lavarse las manos ante este accidente trágico, lo que es ya bastante lamentable. Hay que estar encima, porque te la juegan». En ese mismo centro de trabajo, «hace tan sólo unas semanas» un trabajador sufrió un accidente grave al caer de seis o siete metros de altura. «No había dispositivos de seguridad. la empresa señaló que era un accidente grave. Lo que está claro es que no hacen prevención y, sin embargo, se preocupan de esconder los accidentes de trabajo». En la planta de Lesaka, por otro lado, hace unos días «no ocurrió un accidente de consecuencias fatales por casualidad. Porque el encargado de la grúa también es almacenero. Mientras guiaba a un camión marcha atrás, éste casi aprisiona a un trabajador. Se salvó por poco». Esta situación se produce, sobre todo, porque «se están imponiendo unos ritmos de producción elevados en ese centro, ya que tienen una prima de producción. Lo que está claro es que eso va en contra de la seguridad y la salud en el trabajo».

Mayor ritmo, menos salud

En este caso, LAB recuerda que en la Acería Compacta de Bizkaia en las reuniones en materia de seguridad y salud laboral «la dirección señala la necesidad de proteger a los trabajadores, pero luego nos encontramos, una vez que se termina el encuentro, con que los mandos intermedios presionan para aumentar la producción». El año pasado la previsión inicial se situó en producir 1,5 millones de toneladas de acero, pero se rebasaron los 1,6 millones. Para este año se quiere alcanzar 1,8 millones de toneladas. En este caso, se recuerda que «está primando la cantidad sobre la calidad y sobre la prevención de riesgos».

Un efecto directo que, por otra parte, puede tener este sistema de ocultar bajas o accidentes de trabajo puede estar en la puesta en marcha del sistema del «bonus-malus». Es decir, aquellas empresas que tengan menos accidentes se beneficiarán en el menor pago de cotizaciones. Para 2008, existe un presupuesto del Ministerio español de Trabajo de 90 millones para bonificar a las empresas, lo que generará picaresca.