Tras las elecciones del 9-M
El PSOE tiende la mano al PP, envuelto en las dudas sobre su liderazgo
GARA | MADRID
El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, tendió ayer la mano al PP, envuelto en las dudas sobre si Mariano Rajoy continuará al frente del partido. Zapatero avanzó que, en cuanto pasen «unos días razonables» y se despeje «la resaca electoral», tiene intención de hablar con Rajoy para establecer un primer contacto antes de mantener reuniones «más a fondo». Los dos temas principales serán «la unidad en la lucha antiterrorista» y la renovación de los órganos constitucionales.
Subrayó que la victoria del PSOE con 169 diputados le otorga una mayoría «suficiente, fuerte y sólida» para desarrollar sus proyectos económicos y sociales. Añadió que, si bien aún es «pronto» para hablar de pactos, dialogará con todas las fuerzas parlamentarias.
Asimismo, se mostró muy satisfecho por el índice de participación y por el resultado, por lo que agradeció a los ciudadanos su confianza. «Cuando se tienen más votos y escaños, hay que gobernar mejor, y ése e mi propósito; cuando se tienen más votos y más escaños, hay que gobernar con más humildad y ése es también mi propósito».
También se refirió a los resultados «excelentes» del PSC. En su opinión, la ciudadanía «ha apreciado que más allá de los problemas circunstanciales, que han sido importantes, hemos llevado a cabo una política de diálogo, entendimiento, respeto y apuesta de futuro».
Con respecto a Andalucía, comentó que quien debe hacer autocrítica es el partido que pierde, en alusión al PP.
En el caso de Valencia, reconoció la clara victoria de éste, al tiempo que apostó por hacer un mayor esfuerzo para mejorar la posición del PSOE.
Zapatero no adelantó cuál será su nuevo Gobierno, pero dejó caer la posibilidad de que José Bono presida el Congreso, y que su intención es que continúen «los dos pilares» de la pasada legislatura, María Teresa Fernández de la Vega y Pedro Solbes.
La jornada de ayer estuvo marcada por las especulaciones sobre el futuro de Rajoy. En su saludo a los simpatizantes que se acercaron a la calle Génova, subrayó que el partido estará «a la altura de las circunstancias».
«No voy a defender en mi vida, porque no lo he hecho nunca y a estas alturas menos, más que los intereses generales de los españoles y mi país, una gran nación que se llama España», insistió antes de despedirse con un lacónico «adiós».
Los periodistas se quedaron esperando sus declaraciones en la sala de prensa. Ayer tampoco compareció, en su lugar lo hizo el secretario general del PP, Ángel Acebes, que resaltó los buenos resultados, evitando las insistentes preguntas sobre el liderazgo de Rajoy y remitió la cuestión a la reunión de hoy del Comité Ejecutivo Nacional.
Eso sí, remarcó que el PP «no es un partido de personalismos. No lo es y no lo va a ser nunca porque lo que importan son los principios y los valores».
Acebes justificó la ausencia ayer de Rajoy, diciendo que había estado toda la mañana «trabajando» en su despacho. «Las preguntas que tengan que hacerle podrán hacérselas mañana -por hoy-. Va a comparecer tras el Comité Ejecutivo», añadió.
«Tiempo para todo»
Sobre la convocatoria del XVI Congreso Nacional y un hipotético proceso de renovación interna, comentó que «habrá tiempo para todo» y que las decisiones las deben tomar los órganos colegiados. «Las iremos tomando y convocando conforme establecen las normas internas, como hemos hecho siempre», agregó Acebes.
A lo largo de su intervención, incidió en conceptos como «unidad y fortaleza». «Lo más importante hoy es la unidad interna del partido y su fortaleza, que como ha quedado demostrado en estas elecciones, es una de las señas de identidad y de la realidad del PP y, por tanto, una garantía y una seguridad para todos aquellos que nos han votado», destacó.
Aunque defendió la línea mantenida hasta el momento y auguró «tiempos complicados», especialmente, para la economía, expresó la intención del PP de recuperar los consensos y de hablar con el Gobierno de los asuntos fundamentales «en defensa del interés general y desde nuestros principios y valores».
El secretario del PP en Madrid, Francisco Granados, también quiso salir al paso de los rumores que apuntan a la dimisión de Rajoy y al relevo de Esperanza Aguirre, asegurando que lo que ahora toca es «analizar los resultados y la situación. No es el momento de debatir».
Valencia y Madrid para PP
Valencia y la Comunidad de Madrid siguen siendo los grandes feudos del PP, en los que ha visto reforzada su buena posición.
Si en 2004 obtuvo 17 diputados en Valencia, el domingo consiguió 19 y superó en más de diez puntos la distancia respecto al PSOE, que se quedó con 14 escaños, los mismos que en 2004. En Madrid, con una muy alta participación -cifrada en el 80,84%- el PP se alzó con 18 diputados frente a los 15 del PSOE.
El presidente del PP en Valencia, Francisco Camps, equiparó los resultados generales del domingo con los de 1993, cuando el PSOE «no llegó a la mayoría absoluta y el PP ganó las siguientes elecciones», algo que, a su juicio, ocurrirá en 2012.
La diputada electa por esta comunidad y vicepresidenta primera del Gobierno en funciones, María Teresa Fernández de la Vega, admitió que el resultado no le produce «gran satisfacción», aunque, en su opinión, servirá de «punto de partida para recuperar la confianza».
El PSOE obtuvo 594.273 sufragios, 19.500 menos que en las generales de 2004 y 161.000 más que en los comicios autonómicos del pasado mayo.
Bajada de ERC en Catalunya
El varapalo que ERC se llevó el domingo no causó demasiada sorpresa en Catalunya. La indefinición mostrada y su apoyo a Montilla ha desilusionado a una buena parte de su electorado, que ve incongruente las últimas actuaciones del partido con su discurso independentista. El primer candidato de ERC por Barcelona, Joan Ridao, reconoció que «una parte importante del electorado soberanista e independentista se ha quedado en casa, se ha abstenido, o bien no ha tenido confianza en ERC». El «voto útil» ante «el miedo al PP» también jugó en su contra.
Una de las consecuencias de esta bajada fue el anuncio del secretario general de ERC y conseller de Gobernación, Joan Puigcercós, de que abandonará la Generalitat para dirigir el partido y el adelanto a junio del congreso previsto para octubre.
Quien tampoco estaba contento con los resultados e, incluso, pidió dimisiones en el seno de su partido fue el diputado por el PP en el Parlamento catalán y estrecho colaborador de Josep Piqué Francesc Vendrell, para quien el PPC «no entiende» Catalunya. «Creo que Rajoy no debería dimitir, otra cosa es que debería hacer dimitir a unos cuantos», manifestó.
El PSC aumentó pasó de 21 a 25 escaños, mientras que CiU consiguió 11, uno más.
Desgaste del PSOE en Andalucía
Manuel Chaves se hizo nuevamente con la Presidencia de la Junta con 56 diputados, cinco menos que en 2004. El PP, liderado por Javier Arenas, recortó distancia. Obtuvo 1.721.964 votos, casi 300.000 más, lo que le otorga 47 representantes.
Para Chaves, el avance del PP se debe a «cierto desgaste» del PSOE porque «en muy raras ocasiones», se ha dado la circunstancia de que un partido que lleva 26 años gobernando logre la mayoría absoluta.
El PP aguanta en el Senado
El PP mantiene la posición de supremacía en el Senado que ya ostentaba en la pasada legislatura, con 101 senadores, que sumados a los 21 que tiene por designación autonómica, hacen un total de 122 representantes, uno menos que en 2004.
El PSOE ha logrado 89 escaños, a los que se añaden los 17 senadores autonómicos. En total, 106 parlamentarios, lo que representa una subida de ocho puntos a costa de la caída del PNV, que se queda con tres, y de Coalición Canaria, que pierde a sus tres representantes.
Por primera vez tras las elecciones del domingo, el líder del PP, Mariano Rajoy, y el jefe del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, coincidirán hoy en la glorieta de Atocha de Madrid en un acto organizado con motivo del aniversario del 11-M.
Rodríguez Zapatero recibió ayer la llamada del presidente francés, del de la Comisión Europea, de los primeros ministros de Italia y Portugal, y del ex presidente Jacques Chirac, que le felicitaron por su victoria. Angela Merkel le envió un mensaje.
La Comisión Permanente de IU se reunirá hoy para comenzar a fijar los primeros trámites para la convocatoria de la próxima Asamblea Federal en la que se elegirá al nuevo coordinador general, y para «modernizar» su coalición con ICV y EUiA.