Irun despide a la pintora que difundió en todo el mundo los paisajes del Bidasoa
Vecinos, autoridades y personalidades de la cultura dieron ayer su último adiós a la artista irundarra Menchu Gal, primera mujer ganadora del Premio Nacional español de Pintura, fallecida el miércoles en Irun, donde nació hace 90 años. Su cuerpo permaneció durante la jornada en el tanatorio del Bidasoa, y hoy recibirá sepultura en el cementerio de Blaia, en un acto que se realizará en la intimidad por expreso deseo de la familia.
GARA | IRUN
El cuerpo de Menchu Gal permaneció durante el día de ayer en el tanatorio del Bidasoa, y hoy recibirá sepultura en el cementerio de Blaia, en un acto estrictamente familiar, por expreso deseo de sus allegados.
Durante la tarde de ayer se ofició el funeral en la parroquia de Nuestra Señora del Juncal, donde decenas de ciudadanos pudieron darle el último adiós a esta hija ilustre de Irun.
El Ayuntamiento irundarra hizo público mediante un comunicado el pésame por la muerte de Menchu Gal y transmitió a su familia y amigos su «apoyo y condolencia en estos momentos tristes», al tiempo que expresó el agradecimiento de la ciudad «para una de sus hijas más ilustres».
También la presidenta de las JJGG de Gipuzkoa, Rafaela Romero, mostró en una nota sus condolencias por el fallecimiento de la artista, de quien recordó que «estuvo trabajando prácticamente hasta el final, hasta cuando su salud se lo impidió».
Romero expresó también el agradecimiento de la sociedad guipuzcoana hacia la pintora, «cuya trayectoria artística fue magnífica, así como su trayectoria personal, porque fue una mujer pionera en muchos sentidos». No en vano, Menchu Gal fue reconocida como una de las principales artistas plásticas de la posguerra, lo que le valió convertirse en 1959 en la primera mujer que obtuvo el Premio Nacional español de Pintura.
Nació en Irun el 7 de enero de 1918 y desde su infancia mostró un gran interés por la pintura -que aprendió de maestros como Gaspar Montes Iturrioz- hasta que con 15 años logró una beca para continuar su formación artística en la academia parisina de Amedée Ozenfant. En la última etapa de la artista se sucedieron los reconocimientos, como la Medalla de Oro de Gipuzkoa 2005, el Premio Manuel Lekuona o la Medalla de Oro de la Ciudad de Irun (2006), otorgada por sus méritos y trayectoria artística, además de por hacer posible que el nombre de su ciudad se paseara con ella por algunos de los escenarios culturales más relevantes de la Europa del siglo pasado.
Menchu Gal recibirá hoy sepultura en un acto estrictamente familiar que se desarrollará en el cementerio de Blaia.