Cientos de ultrasionistas trataron ayer de demoler la casa del autor del atentado contra la yeshiva radical Merkaz HaRav, en Jerusalén, el pasado 6 de marzo. La Policía israelí les cortó el paso y se produjeron enfrentamientos.

Los manifestantes ultrasionistas trataron de penetrar en el barrio árabe de Jabal Mukaber, en el que vivía Alaa Hicham Abú Dheim, autor del atentado, que provocó la muerte de ocho alumnos de este instituto talmúdico, vinculado a rabinos que justifican la muerte de civiles palestinos para lograr la expansión territorial y el Eretz Israel.

Tras lanzar piedras contra la Policía, se dirigieron al cercano barrio árabe de Abú Thor, donde gritaron «Muerte a los árabes» y «Venganza» y se registraron varios actos de vandalismo.