Si ya se daba por hecho que la contienda electoral tocaba a su fin, la relación de fuerzas resultante de los comicios del pasado domingo ha provocado un auténtico seísmo en la futura composición del Consejo General de los Pirineos Atlánticos. Tanto es así, que algunos lo han denominado la tercera vuelta de las elecciones.

El posicionamiento de los diferentes consejeros en el grupo de la izquierda o en el de la derecha según sus adscripciones ha motivado que ya no haya un grupo mayoritario claro en la institución departamental, ya que tanto uno como otro contarían con el mismo número de consejeros. Eso si, como suponen MoDem y UMP, el consejero de Hiriburu Alain Iriart se une al grupo de Diversas Derechas. En caso contrario, sería la izquierda quien dominase el hemiciclo que, curiosamente, está compuesto por un número par de escaños (52). Entonces, el pretendiente socialista a la presidencia, Georges Labazée, no tendría mayor problema para ha- cerse con el cargo que hasta ahora ha ocupado el bidaxuntarra Jean-Jacques Lasserre.

De todos modos, incluso si Iriart, militante de AB que se autodenomina como abertzale de centro-izquierda, se integrara en el bloque de la derecha, se daría un empate técnico pues los grupos de la derecha y de la izquierda tendrían cada uno 26 consejeros en su seno.

Este empate se debe al apoyo de dos consejeras socialistas tránsfugas -Monique Larran-Lange, también concejala de Baiona, y Josy Poueyto, consejera de Pau-centro- que renovaron su cargo en 2004.

En caso de empate...

En ese supuesto, el reglamen- to del Consejo General prevé que, si al cabo de dos votacio-nes no se dilucida quién presidirá dicha institución, el consejero de mayor edad sería nom- brado presidente. En consecuencia, dicha función recaería, en principio, en Jean Casteings, consejero general del cantón vasco de Bastida, por lo que, futuros problemas de gobernabilidad aparte, la Presidencia quedaría en manos de la derecha.

Sin embargo, esta cuestión también está suscitando gran debate entre los partidos UDF-MoDem y UMP. Y es que Casteings pertenece a esta última formación que, al perder cinco consejeros el pasado domingo, es muy minoritario en el grupo. En efecto, de los 25 adscritos oficialmente (contando las dos tránsfugas socialistas), sólo cuatro son de la UMP.

Por ello, la UDF/MoDem está analizando el reglamento con el objetivo de localizar la posibilidad de que Casteings renuncie al cargo y, en su lugar, sea el consejero que le siga en edad quien lo ocupe. Si esa eventualidad se ratificase, sería Juliette Séguéla, consejera MoDem de Biarritz-este, la nueva presidenta del Consejo General. No parece que el propio Casteings tenga impedimentos para ceder la función a Séguéla.

Sea como fuere, y si no se dan grandes cambios hasta el jueves, fecha en la que se constituye el nuevo Consejo General, lo que sí es casi seguro es que Jean-Jacques Lasserre no presidirá de nuevo el Parlamento de Pau.

Durante prácticamente toda la jornada de ayer los dos consejeros más buscados fueron, lógicamente, Alain Iriart y el propio Lasserre. Hacia finales de la tarde, una radio local conseguía entrevistarlos, si bien los dos se refugiaban en declaraciones bastante ambiguas.

«Soy libre e independiente»

Iriart, que consiguió el escaño en la primera vuelta del 9 de marzo con una holgada mayoría de votos (65,33%), no precisó cuál va a ser su posición: «No formo parte ni de la mayoría departamental [por la última de derecha] ni tampoco de la oposición. Mi caso es bastante particular. Soy libre e independiente y quiero, además, seguir siéndolo. Quiero dejar claro, sin embargo, que tengo la intención de trabajar en los proyectos que vayan en beneficio de los habitantes de mi cantón. Por eso, esperaré a que las cosas se aclaren antes de decidirme».

En cambio, el recién elegido consejero, que también ha renovado su cargo de alcalde en Hiriburu, despejó dudas sobre lo que haría en caso de que Jean-Jacques Lasserre se volviese a presentar. «Ya lo he manifestado anteriormente. Tengo relaciones de confianza y de trabajo con él y me posicionaré a su favor. Pero hoy por hoy no sé cómo irán las cosas ni tampoco las opciones que van a adoptar ni unos ni otros. Me posicionaré en relación a las declaraciones que hagan. Mi ubicación es harto conocida: soy abertzale de centro-izquierda y cuando llegue el momento daré a conocer mi elección, como lo harán el resto de consejeros. ¿Quién sabe? Quizás no sea el consejero de Saint-Pierre d'Irube el que marque la diferencia. Puede que lo haga algún otro del Bearn o del País Vasco interior». No parece, pues, que Iriart vaya a optar por la abstención, entre otras razones, porque él mismo aseguró ayer «que no suele acostumbrar a hacerlo».

Peio Etxeberri-Aintxart, uno de los portavoces de Abertzaleen Batasuna, formación a la que pertenece Iriart, manifestaba ayer que a él corresponde «decidir en base a su conciencia e ideas», apostillando que está claro que AB no apuesta por apoyar a la derecha, si bien subrayaba a renglón seguido que la postura que mantienen mayoritariamente los socialistas respecto a Euskal Herria debería ser otra.

En lo que respecta a Jean-Jacques Lassserre, las declaraciones realizadas por él en la misma emisora traslucían que ya ha dado finiquito a sus pretensiones de optar a la Presidencia. «La ley es clara. Dice que en caso de empate es el de más edad quien será presidente. Por eso voy a reflexionar con mis colaboradores sobre la mejor actitud y estrategia a poner en marcha en estas circunstancias», manifestó.

Lasserre reconocía que la situación a la que se ha llegado le ha producido «por supuesto decepción», al tiempo que aseveraba que durante estos años se ha «aplicado con tesón para que el País Vasco y el Bearn vivan juntos. Haré lo posible para que este objetivo siga en pie porque lo considero primordial». Remitiéndose a la jornada del jueves, cuando se constituirá el nuevo Consejo, Lasserre no dio más explicaciones sobre si en el futuro se mantendrá en su escaño de consejero del cantón de Bidaxune, que volvió a conquistar en la primera vuelta con más del 75% de los sugragios.

Este embrollo poco habitual es consecuencia directa del avance logrado en el Departamento y también en los cantones vascos -aunque menos- por la izquierda.

Concejales abertzales

Los resultados también han supuesto cambios en ayuntamientos significativos y en el número de concejales abertzales.

Aun sin conocer en detalle el número de electos de esa adscripción, es de reseñar que Biharko Hendaia ha conseguido estrenar uno; en Urruña, que contaba con dos, han duplicado; en Uztaritze han logrado el mismo número, es decir, tres concejales, lo mismo que en Senpere, que tiene dos; en Azkaine y en Ziburu han logrado uno más, pasando a tener dos ediles en ambas corporaciones. En cambio en Angelu, al haber perdido la Alcaldía Robert Villenave, en cuya lista figuraban varios abertzales, sólo ha quedado uno de los dos que resultaron elegidos en 2001. En Baiona no habrá ediles abertzales al no haber obtenido Baiona Berria renovar los dos que tenía. En Biarritz, además de Peio Claverie que presentaba lista propia, habrá cinco que integraban la lista del alcalde Didier Borotra.