Tour
Astana, el único equipo ProTour que no estará en la salida
Los organizadores de la Grande Boucle excluyen a la formación en la que milita Alberto Contador, vencedor en 2007. Euskaltel volverá a estar en la ronda gala.
GARA | PARIS
Astana, en el que corre Alberto Contador, ganador de la última edición del Tour, es el único equipo de los que componen la selección del ProTour que no participará en la ronda gala, informaron ayer los organizadores. En total, 20 equipos tomarán la salida del próximo Tour en Brest el próximo 5 de julio.
Los organizadores de la Grande Boucle anunciaron hace un mes que el Astana no estaría en la carrera a causa de los casos de dopaje que afectaron al equipo en la pasada temporada, por lo que la decisión no ha sido una sorpresa. «Astana traicionó el año pasado la confianza de los organizadores», aseguró la empresa propietaria del Tour para justificar la ausencia del equipo de Contador.
La nómina de participantes en el próximo Tour la completarán tres formaciones de segunda división, la francesa Agritubel, la estadounidense Slipstream y la británica Barloword. Euskaltel volvera a estar un año más entre los participantes. Estos son los 20 equipos que estarán en la salida de Bretaña: Gerolsteiner, Team Milram, Quick Step, Silence-Lotto, Team CSC, Caisse d'Epargne, Euskatel, Saunier Duval, High Road, Slipstream Chipotle, Bouygues Telecom, Crédit Agricole, Cofidis, Française Des Jeux, AG2R, Agritubel, Barloworld, Lampre, Liquigas y Rabobank.
A vueltas con el T-Mobile
Por otro lado, la actualidad ciclista volvió a girar en torno al dopaje. Y es que, según el informe de la comisión investigadora de la Universidad de Friburgo, entre los ciclistas y médicos deportivos del equipo alemán T-Mobile se practicó el dopaje masivo entre 1993 y 2006. «Vistas las informaciones de que disponemos, la comisión concluye que entre 1993 y 2006 los corredores del equipo Telekom, luego T-Mobile, fueron dopados por médicos del departamento de medicina deportiva», apunta el informe, presentado ayer, por la universidad en la que ejercieron los citados médicos.
Tales preparadores, de los cuáles hasta ahora se conocen cuatro nombres, habrían percibido «notables sumas» de dinero extra por su trabajo, añade la investigación.
La comisión de la Universidad de Friburgo refrenda asimismo la teoría de que Patrick Sinkewitz, uno de los «confesos» del T-Mobile, suspendido del último Tour precisamente por dar positivo, no era un caso aislado, tal como el propio ciclista ha sostenido. Entre otros, cita el caso del velocista Erik Zabel, quien de acuerdo a sus investigaciones, inició un tratamiento de EPO de tres semanas en el Tour de Suiza de 1996. Zabel admitió en mayo de 2007 haber tomado EPO «por corto tiempo».
Oscar Freire, vencedor en 2007 y 2004, quiere hacer valer su buen momento de forma para lograr el triplete en la Milán-San Remo. El velocista del Rabobank viene de ganar dos etapas en la Tirreno Adriático, donde batió a sus principales rivales para la carrera de mañana (15.10, ETB-1), por lo que parte como favorito.
El recorrido de la «Classicissima», que cumple su 99 edición, no cuenta con excesivas novedades respecto a años anteriores. El Poggio, cota situada a seis kilómetros de meta -3,7 kilómetros, con una media de 3,7%-, será el punto más caliente de la carrera. Euskaltel acude con Egoi Martínez e Iñigo Landaluze como jefe de filas. A.S.
«Astana traicionó el año pasado la confianza de los organizadores», aseguró la empresa propietaria del Tour para justificar la ausencia del equipo de Contador.
«La comisión concluye que entre 1993 y 2006 los corredores del Telekom, luego T-Mobile, fueron dopados», según indica el informe de la Universidad de Friburgo.