Una persona que dormía en el interior del habitáculo de un cajero automático en el centro de Bilbo apareció muerta ayer por la mañana, según informó el Departamento de Interior del Gobierno de Lakua.

Las primeras averiguaciones de la Ertzaintza, según indicaron las mismas fuentes, apuntaban a que la muerte de este hombre, que se encontraba en el cajero, le sobrevino «por causas naturales».

Concretamente, el cuerpo del fallecido fue encontrado a primeras horas de la mañana en el interior del habitáculo de un cajero de la BBK que está situado en la calle General Concha de Bilbo.

El suceso fue comunicado por un vecino de la zona a la Policía autonómica, cuyos agentes se desplazaron hasta el lugar de los hechos para investigar las causas de esta muerte.

Este dramático hecho concitó la inmediata reacción de Elkartzen, que en una nota denunció que « esto sucede en la ciudad del BBVA, entidad bancaria con unos beneficios declarados superiores a los 6.000 millones de euros en 2007». «Ibarretxe y Sanz nos dicen que en Euskal Herria se genera una gran riqueza. Y es cierto. Lo que no nos dicen es que esa riqueza cada vez se reparte de una manera más injusta», agrega este organismo.

«Levantar un muro»

Para Elkartzen, lo sucedido en la noche del miércoles en Bilbo «es la representación de la situación más extrema de esa precariedad a la que se nos está sometiendo», es «la otra cara de la opulencia que se nos vende con postales de Guggenheim». Frente a ello, valora que «es necesario levantar un muro ante la precariedad, que impulse la transformación social de nuestro pueblo».