COAG reparte 3.000 litros de leche en protesta por la crisis de precios del sector
La crisis de precios del sector lácteo llevó ayer a varios cientos de ganaderos de distintos puntos de la Península, también de Euskal Herria, a las puertas del Ministerio español de Agricultura en Madrid, para denunciar que «la industria láctea y la distribución roban al ganadero y al consumidor». Los participantes en la protesta -medio millar según COAG- derramaron leche contenida en quinientos envases y repartieron miles de litros entre los transeúntes.
GARA |
Varios centenares de ganaderos protagonizaron ayer una concentración ante el Ministerio español de Agricultura par denunciar que la «industria láctea y la distribución roban al ganadero y al consumidor».
Entre ruido de silbatos y cencerros, el secretario general de la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG), Miguel López, denunció la bajada del precio de la leche aplicada por la industria al productor, teniendo en cuenta que los costes de producción se han encarecido en más de un 40%.
También aseguró que el incremento de cuota láctea de un 2% lineal en toda la Unión Europea mejora la vida del productor alemán y del Estado francés, en detrimento de los ganaderos del Estado español.
Los Veintisiete aprobaron, con el voto en contra de Alemania y Eslovenia, la medida el pasado día 17 para aumentar la oferta, bajar los precios y «acostumbrar a los ganaderos a la idea de que esos cupos van a desaparecer en 2015».
La comisaria europea de Agricultura, Mariann Fischer Boel, recordó que «en el último año hemos asistido a una notable subida de precios de la leche y a una exigencia cada vez mayor de incrementos de cuotas; debemos pues proporcionar a nuestros ganaderos los medios necesarios para satisfacer esa demanda».
La decisión no fue recibida por satisfacción por COAG. El responsable del lácteo de la coordinadora, Gaspar Anabitarte, consideró que el incremento lineal acordado «abre la puerta a una inquietante liberalización del sector lácteo comunitario». Vaticinó, al tiempo, una falta de rentabilidad de las explotaciones por los precios a la baja y el aumento de los costes, escasez y precios muy altos al consumidor. Ante esa tesitura, reclamó un sistema que garantice el equilibrio y la estabilidad y que la capacidad productiva se adecúe al consumo, con precios «dignos y razonables» tanto en el origen como en el destino.
«Auxilio permanente»
En la protesta de ayer en Madrid, Miguel López afirmó que «pedimos auxilio permanente». El representante de COAG, coordinadora en la que participa EHNE, arremetió contra el Gobierno español por la falta de solu- ciones y contra la distribución por potenciar sus marcas blancas. Reclamó, al tiempo, la apertura de un acuerdo marco interprofesional que clarifique «un mercado lácteo democrático».
Durante la concentración, la organización tenía previsto quemar una pirámide construida con unos 500 envases de leche de las principales marcas del mercado, pero la iniciativa no pudo llevarse a cabo ante la prohibición policial. No pudieron impedir, sin embargo, que, en medio del estruendo producido por los petardos que lanzaron, los ganaderos derramaran la leche en la carretera.
No toda fue a la calzada, ya que repartieron de forma gratuita 3.000 litros de leche. Asimsimo, COAG repartió gorras y pegatinas reivindicativas entre los presentes.
La situación por la que atraviesa el sector lácteo agrava la realidad del conjunto del sector ganadero, especialmente tocada la realidad de los productores de ovino-caprino, vacuno de carne, porcino y conejo con las nuevas subidas del precio de los piensos y la tendencia a la baja de los precios en origen.
COAG denunció la reducción de precios aplicada por la industria láctea en un momento en el que los costes de producción han experimentado un incremento superior al 40%.
En el transcurso de la concentración realizada en Madrid, representantes de COAG reclamaron la apertura de un acuerdo marco interprofesional que clarifique «un mercado lácteo democrático».
En el transcurso de la concentración convocada por la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG), el director general de Ganadería, Carlos Escribano, reconoció a los periodistas que desde el comienzo de cambio de ciclo en los precios de la leche, el sector ganadero está asistiendo a una serie de problemas y subrayó que el Ministerio español de Agricultura «quiere servir de intermediario para que las relaciones contractuales entre productores e industria funcionen».
Explicó que en la reunión celebrada esta semana se acordó constituir tres mesas de trabajo: una para cuestiones contractuales, que se celebrará el próximo jueves; otra para definir la postura de Madrid respecto al «chequeo médico» de la PAC; y la tercera dirigida a revitalizar la interprofesional láctea, que «es el marco adecuado donde discutir las cuestiones contractuales de las partes».
Carlos Escribano abogó por trabajar en la elaboración de un código de «buenas prácticas» que fije las relaciones entre los productores y la industria y ofreció la colaboración del Ministerio de Agricultura para que «se pueda llegar a un modelo estable similar al de la mayor parte de los Estados miembros de la Unión Europea».
El director general de ganadería del Ejecutivo español consideró una «buena noticia» el incremento lineal de un 2% de cuota láctea en la Unión Europea aprobado recientemente y aseguró que «no hay motivo para que la aplicación de esta medida en Francia influya en el mercado español».
