La comisión de vecinos que se opone a la instalación de un crematorio en el tanatorio que Funeraria Bilbaína tiene en la Avenida Zumalakarregi no va a cejar en su empeño de impedir la construcción del horno incinerador de cadáveres. Anuncian, por ello, una nueva manifestación para el viernes 18 de abril.

Los vecinos no quieren un crematorio en Zumalakarregi. Por ello, advierten al alcalde, Iñaki Azkuna, de que «ningún interés económico privado, Funeraria Bilbaína con su crematorio, ni público, el Ayuntamiento de Bilbao con el cementerio de Derio, deben estar por encima de la salud de las personas ni de la voluntad de la ciudadanía, que así lo han manifestado en la calle y volverán a expresarlo las veces que sea necesario».

La plataforma ciudadana insiste en que Azkuna -médico de profesión-, al igual que los jueces, técnicos municipales y de Lakua, deben preservar la salud de los bilbainos. «Si tienen que negociar con Funeraria Bilbaína que lo hagan. El número de irregularidades cometidas en este caso es tal, que deben a los ciudadanos el dialogar con la empresa y alcanzar un acuerdo», declaran los afectados.

Además de pedir una negociación, la comisión se reunirá hoy con la compañía de pompas fúnebres «para hacer ver a esta empresa que no pueden cometer una irresponsabilidad social sólo porque sus abogados hayan hecho su trabajo mejor que los del Ayuntamiento». Otra iniciativa va a ser remitir al Ararteko una nueva petición para que intermedie en este conflicto social.

«En esta ciudad no se pueden incrementar más los riesgos de muerte procedentes de instalaciones contaminantes. La causa principal de mortalidad en Bilbao -apuntan- es el cáncer con un 35,7%, seguida de enfermedades respiratorias con un 27,7%», argumentan a la hora de insistir en su oposición a la ubicación de un horno en pleno centro de la villa.