Crónica | Sur de Irlanda
El hostigado Ahern cede el cetro a uno de sus leales
A rey muerto, rey puesto. cuando no se han apagado los rescoldos del anuncio de abandono de todas sus responsabilidades de Bertie Ahern, su sucesor en la sombra del Ministerio de Finanzas, Brian Cowen, ya ha anunciado su candidatura al liderazgo del Fianna Fail y al puesto de primer ministro.
Soledad GALIANA Dublín
Prácticamente un año después de que el británico Tony Blair tomara una decisión similar, Irlanda se encuentra en la misma disyuntiva. Sin embargo, si la relación entre Blair y el actual primer ministro británico, Gordon Brown, fue controvertida y difícil en los últimos años, en el caso Irlandés, Cowen se ha mantenido lealmente detrás de Ahern en los momentos más difíciles. Y quizás han sido esos momentos difíciles, que se han transformado en casi una constante, los que han precipitado el anuncio de Ahern, sorprendente e inesperado dentro y fuera de su partido.
Ahern se ha tenido que enfrentar a una investigación sobre sus asuntos financieros, y posible corrupción, durante algunos meses. Asimismo, ha sido llamado a declarar ante el Tribunal investigador encabezado por el juez Mahon en tres ocasiones. En todas y cada una de ellas, y en todas las declaraciones relacionadas con las «donaciones personales» que recibió entre 1985 y 1997, Ahern se ha mostrado desafiante, asegurando que estaba colaborando de lleno con la investigación y que sólo hablaría de estas cuestiones ante el Tribunal. Sin embargo, con cada aparición la evidencia de la obstrucción del círculo de Ahern a la investigación se hacía más obvia.
Muchos apuntan a que fue la declaración de su secretaria personal, Grainne Carruth, ante el Tribunal la que abrió la caja de Pandora, pero otros apuntan que fue la acumulación de los datos descubiertos por la investigación -y que se traducen en donaciones de casi un millón de euros, parte en dólares y libras esterlinas, para Bertie Ahern- la que le dio el último empujón.
En EEUU o en la UE
Pero Ahern ha jugado también un papel importante en su propia caída, ocultando información, intentando limitar el periodo a investigar y la cantidad de donaciones a tan sólo 30.000 libras irlandesas, una cantidad insignificante entre los veintidós ingresos en su cuenta bancaria ahora investigados. De hecho, poco antes de las elecciones del pasado año, en una entrevista acordada con el canal público RTE, Ahern aseguró que esas 30.000 libras era la única donación que había recibido. Luego llegó el descubrimiento de los ingresos en libras esterlinas que Ahern intentó enmascarar como parte de su salario, tal y como inicialmente declaró su secretaria, que hace sólo dos semanas se retractó ante el tribunal cuando se le recordó la condena que merece el perjurio. Carruth y el director de la entidad bancaria en la que se realizaron los ingresos señalaron que éstos se produjeron en libras esterlinas.
La investigación continúa, y es ahora Bertie Ahern el que se puede enfrentar a acusaciones de perjurio y de engañar al tribunal en su próxima aparición ante la corte, en la que tendrá que aclarar la procedencia de esas cantidades.
Sin embargo, este escándalo no representa de momento el fin de la carrera política de Ahern. Unos apuntan a la posibilidad de que se convierta en el próximo embajador en Washington, sustituyendo al actual, el también ex primer ministro John Bruton. Otros auguran que el interés de Ahern se centra en Europa, y que aspira a hacerse con el cargo de presidente del Consejo Europeo, un cargo que será creeado una vez que todos los estados miembros suscriban el Tratado de Lisboa.
Pero para que el Acuerdo sea ratificado por todos los miembros de la Unión necesita ser aprobado en referéndum en Irlanda, y habrá que ver el daño que la controversia financiera de Ahern podría haberle causado a la campaña que apoya la adopción de este documento.