EAE-ANV denuncia la actitud «obstaculizadora» del PNV a su tarea en las Juntas de Bizkaia
EAE-ANV denunció ayer que su apoderada Begoñe Agirre ha tardado dos meses en acceder a su cargo, a raíz de la actitud «obstaculizadora» del PNV en los diferentes órganos de las Juntas Generales de Bizkaia.
Agustín GOIKOETXEA |
Dos meses ha estado ANV sin representación en la Cámara vizcaina, con la consiguiente imposibilidad de presentar proposiciones no de norma, enmiendas, solicitar información o simplemente utilizar la sala de prensa, a pesar de los 72.000 sufragios que obtuvieron los independentistas en los comicios forales, tal y como recordó ayer Arantza Urkaregi.
En virtud de la Ley de Partidos, de las cinco actas de apoderado que les correspondían tan sólo cuentan con una, que desde el miércoles ocupa Begoñe Agirre tras la dimisión en enero de Andoni Arriola. Urkaregi achacó el retraso en la toma de posesión de su compañera, que contaba con la credencial de la Juntas Electoral desde el 6 de febrero, a la actitud «obstaculizadora» del PNV.
Acusó a los jeltzales de convocar la comisión de incompatibilidades tras el Pleno del 20 de febrero para así «impedir el trabajo político de ANV en las Juntas Generales de Bizkaia». Además, Urkaregi dijo que el PNV, retrasando la toma de posesión de Agirre, ha esperado a que llegara una orden del juez de la Audiencia Nacional española Baltasar Garzón solicitando que se les congelen las asignaciones económicas para así restar derechos a la apoderada ekintzale. De este modo, no cobrará dietas ni gastos por transporte, además del dinero destinado a pagar el salario de la secretaria.
Las críticas de Urkaregi no se quedaron ahí, pues informó de que la presidenta de la Cámara se ha dirigido al magistrado para preguntarle «qué tiene que hacer». «Es vergonzoso. En qué se queda la autonomía de las instituciones que tanto han defendido en manifestaciones con motivo de la causa contra Atutxa», declaró, antes de apostillar que, a juicio del PNV, la apoderada de EAE-ANV no tiene ningún derecho.
«Vamos a seguir trabajando», subrayó la portavoz ekintzale, que aclaró que las maniobras en su contra no les van a retraer a la hora de trabajar por una «Bizkaia diferente», planteando iniciativas y tratando de controlar al Ejecutivo monocolor de José Luis Bilbao.
Las representantes ekintzales denunciaron ayer que la víspera, en un receso del Pleno de las Juntas Generales en Gernika, el diputado general, José Luis Bilbao, convocó a todos los grupos políticos para informarles acerca del desfalco descubierto en el Museo Guggenheim, excepto a la apoderada de ANV. Begoñe Agirre enmarcó este hecho en la política de ponerles obstáculos, llegando, ante una propuesta para crear un departamento específico de igualdad, a votar todos los grupos en contra, «incluidos Ezker Batua y Aralar».
«Vamos a seguir impulsando nuestro trabajo político, porque queremos construir una Bizkaia diferente», señaló, antes de abogar porque «la política que impulse la Diputación debería servir para abordar las prioridades de la mayoría de los ciudadanos y ciudadanas de Bizkaia, para impulsar la justicia y la redistribución de la riqueza». Esta línea de trabajo, aclaró es opuesta a la desarrollada por el PNV, «que sigue un modelo neoliberal y de derechas, dando la espalda a las verdaderas necesidades de la ciudadanía vizcaina». Así, mencionó el apoyo de la institución foral a las grandes empresas de obras públicas.
