Surf
Bajo el sol de Durban o en el frío francés, listos para hacer de Braveheart
La élite del surf mundial se halla dividida en dos frentes. Unos están en Durban (Sudáfrica), disputando un WQS 6 estrellas Prime. Otros en Bretignolles sur Mer (Estado francés), compitiendo en un 4 estrellas. Todos se verán las caras en breve. La cita, en las Highlands escocesas.
Juan Pedro SANSINENEA
Etamos en plena vorágine competitiva. De hecho coinciden en el tiempo -que no en el espacio- dos importantes pruebas del WQS. El Vendee Pro, en Bretignolles sur Mer, coqueta localidad francesa del denominado Pays de la Loire que, con sus 4 estrellas, intenta disputar la actualidad surfera al poderoso Durban Quicksilver Pro de 6 estrellas Prime, que se disputa en Sudáfrica.
Como es lógico, en la localidad francesa se reúne la élite europea -incluido el top 45 Micky Picon- más algún extracomunitario sin grandes pretensiones. En Sudáfrica está lo mejor de lo mejor del WQS, más unos cuantos tops 45 con ganas de asegurar puntos para el ranking y dólares para el bolsillo. Hasta Durban viajaron nuestros surfers Hodei Collazo y Eneko Acero, que en su primera aparición han sido eliminados en segunda ronda.
He visto en directo por la web del campeonato la manga de Eneko y, pese a haber comenzado fuerte, no ha tenido opción. Las condiciones eran bastante favorables para sus características. Olas de un metro con viento a favor. Se le hecha en falta a Eneko esa explosividad de la que habla Aritz Aranburu, que en estos niveles de competición es imprescindible. En frente tenía a un Sunny García de vuelta a la competición, poderoso y dominador.
En teoría las olas no eran sus aliadas. El hawaiano -muy conocido en Euskal Herria- necesita más mar. Su edad y su cuerpo no está para filigranas en olas de escasa potencia. Pero quiere volver al WCT y se le ve confiado. Ganó la manga. Por cierto, los dos van con tablas Pukas «made in Euskadi», hechas en Oiartzun. ¿Oiartzun? Bai horixe. El americano Brett Simpson hizo segundo y el neozelandés Jay Quinn tercero. Como pasan ronda los dos primeros, Eneko y Hodei compartirán anécdotas en el avión de vuelta a casa. Ya piensan en Escocia, siguiente cita.
Karlos Gómez y Markos San Segundo
En el Vendee Pro, el getxotarra pequeño de los Acero -Kepa- y los zarauztarras Karlos Gómez y Marcos San Segundo ya están en tercera ronda. Hace dos semanas comentábamos la victoria del junior San Segundo en Tapia. Parece que está en un buen momento y no le impresionan las estrellas de los campeonatos. Atentos al chaval.
En segunda ronda han quedado eliminados el bakiotarra Txaber Trojaola, el donostiarra Norman Landa y el también zarauztarra Oier Illarramendi. Mucho frío y olas de un metro sobre fondo de roca han dado el juego justo y necesario. Se preveen mejores condiciones para mañana.
Es muy oportuna y estratégica la situación de la prueba francesa. Y no es casualidad que el top 45 Micki Picon esté ahí en lugar de haber viajado a Durban. Las condiciones climatológicas del departamento de La Vendée se aproximan a las del siguiente campeonato del circuito, que no es otro que el O´neill Highland 6 estrellas Prime en Thurso, Escocia.
Como decía antes, en la Vendée hace frío. Pero es que Thurso está casi a la misma altura del paralelo que toca el sur de Groenlandia, justo debajo de las Islas Feroe y las Shetland. Si en la prueba francesa los surfistas están utilizando neoprenos de 3 milímetros (los frioleros de 4), en Thurso utilizarán trajes de goma de 4 ó 5 mm. Mas escarpines, guantes y hasta gorros de neopreno. El Vendee Pro es una aclimatación perfecta para Escocia y Picon lo sabe. Mientras él padece bajas temperaturas, algunos de sus oponentes surfean en bañador bajo el sol de Durban. En una semana compartirán las olas con focas y orcas en Thurso.
Y el que firma lo cuenta porque lo ha vivido. En el 81 -cuando en el lago Ness había un monstruo- unos cuantos jóvenes disputábamos el Campeonato de Europa. Allí, un chaval de Orio llamado Iñigo Timón empezó a colocar a los vascos en el mapa del surf europeo, consiguiendo el bronce en categoría junior. Es un sitio bello, especial y con ese carácter escocés tan entrañable. Tan cálido y próximo. Al vencedor le nombran «caballero» del mar con un toque de espada en el hombro. En el 81 -me imagino que ahora seguirá igual- una banda de gaiteros escoceses ataviados tradicionalmente despedían a los competidores. Difícil de olvidar.
Un lugar de leyenda donde bien querría reaparecer nuestro Aritz Aranburu. Ya está entrando al agua. Ya acabaron las largas y aburridas sesiones de rehabilitación. Pero Escocia está demasiado cerca en el tiempo. Este fin de semana va a estar surfeando en su playa de Zarautz, pero no puede llegar a los Highlands con garantías. No está en condiciones de arriesgar y como dice él «a mí me ponen la lycra y ...». O sea, que mejor que se la pongan en la siguiente prueba. En Teahupoo (Tahití). No podrá hacer de Braveheart pero al menos ya puede gritar freedom (libertad).