PNV, EA, EB y PP secundaron ayer en la Junta de Portavoces de Errenteria el texto en apoyo a la Ertzaintza que presentó el alcalde del PSE, Juan Carlos Merino, en relación con «el acto de intimidación y fanatismo» registrado el sábado en el municipio guipuzcoano.

El escrito hace mención al «ataque» que, según Interior de Lakua, sufrieron varios ertzainas, lo que obligó a uno de ellos «acorralado y en el suelo» a realizar dos disparos al aire. Una versión que no se corresponde con las fotografías tomadas in situ ni con los testimonios de varios testigos. De hecho, la mayoría de los medios de comunicación ni siquiera se refirieron ayer a «la emboscada», al igual que el propio alcalde en la moción que presentó, pese a que en la víspera tildó lo ocurrido de «acto de terrorismo». EAE-ANV, por su parte, acusó al resto de partidos de «mentir».

Aunque algunas de las formaciones políticas de Errenteria tuvieron que pedir tiempo para reflexionar sobre su posición al respecto del texto que presentó el PSE en la Junta de Portavoces de las 10.00 en el Consistorio, una hora después todos los partidos salvo ANV, que abandonó la sesión como muestra de protesta, respaldaron el relato que ofreció la Ertzaintza sobre lo ocurrido el sábado. Eso sí, ahora no se menciona ni la «emboscada» ni el «acto de terrorismo» que denunció Merino. Sin embargo, el texto sí insiste en que la Policía fue atacada por decenas de personas.

«¿Qué va a ser lo siguiente?»

La carga de la Ertzaintza se dirigió contra decenas de vecinos que pretendían ofrecer una rueda de prensa para denunciar el operativo policial que el viernes se saldó con el arresto de siete jóvenes del pueblo. Según Interior, los incidentes comenzaron cuando los agentes procedieron a identificar a tres personas que colocaban carteles de «la ilega-lizada organización terrorista Segi», extremo que, como se aprecia en la fotografía publicada el domingo en GARA, tampoco resultó ser cierta.

La formación ekintzale, por su parte, censuró la actitud del resto de los partidos por hacer suya «una versión falsa» de unos hechos en los que, según destacó, «pusieron en riesgo la vida de los que estábamos allí».

El grupo parlamentario Ezker Abertzalea también criticó la actitud «desmedida» de la Ertzaintza y aseguró que actuaciones de este tipo «son característicos de un estado policial». Se preguntó «qué va a ser lo siguiente» y afirmó no entender por qué la Policía procedió de esa forma contra «un acto que se está realizando de forma pacífica». Al respecto, concluyó que se trata de «una decisión política tomada de antemano». También se dirigió a Ibarretxe para que explique cómo encajan actuaciones así en «la hoja de ruta presentada a la sociedad».

En apoyo a los detenidos, ayer 700 personas se manifestaron en Errenteria y 200 en Oiartzun.