Mikel Etxabe volvió a entrenar ayer con el equipo, después de que el pasado trece de marzo se sometiera a una artroscopia para intentar solucionar por fin los problemas en su rodilla. El defensa, además, disputó el amistoso en el que el Eibar se impuso por 7-1 al Aretxabaleta.

Parece que esta vez los plazos se cumplen y Etxabe se muestra optimista de cara a poder disputar algún partido de esta temporada en la que todavía no ha podido debutar. «El tiempo lo dirá, pero yo tengo la esperanza de poder algunos partidos todavía», confesó el atxabaltarra, doblemente satisfecho con la trayectoria del equipo. «La permanencia está a tres o cuatro puntos y para mí la alegría es doble -confesó-: por el equipo, porque se lo merece y trabaja para ello, y para mí, porque siendo egoísta, puedo tener más oportunidades de jugar algún partido si el objetivo se consigue pronto».

Etxabe, por otra parte, aseguró no haber «dado muchas vueltas hasta ahora» a su futuro -su contrato concluye el treinta de junio-, «porque lo más importante es recuperarme del todo», pero reconoció que «es algo que está ahí y habrá que hablar». De momento, el club no se ha puesto en contacto con él.

Además de Etxabe, ayer también se reincorporaron al grupo Codina, Txiki, Goiria y Zurutuza. No fue el caso de Raúl García, Altuna y Del Olmo, que arrastran diferentes problemas físicos y pueden quedarse fuera de la convocatoria para viajar a Alicante, que Javier Mandiola confeccionará esta misma mañana.