Surf
La marejada entre Euskal herriko surf federazioa y la federación española
Son 8 los años que han transcurrido desde que se trató de constituir la Federación Española de Surf, ideada para ser como «el perro del hortelano». Ni come ni deja comer a una Federación Vasca (EHSF) que desde entonces pugna por mantener su reconocimiento internacional.
Juan Pedro SANSINENEA
Desde hace casi diez años, las relaciones entre la EHSF (Euskal Herriko Surf Federazioa) y la FES (Federación Española de Surf) han sido todo menos fluidas. En aquel tiempo, al no existir una federación española legalmente constituida, la vasca, que sí lo estaba y que funcionaba correctamente, fue aceptada a nivel europeo e in-ternacional. Los surfistas euskaldunes participaron en diferentes competiciones internacionales y consiguieron resultados más que aceptables. Al cabo de un tiempo, la FES solicitaba su aprobación como federación, con el apoyo de unos clubes y unos estatutos que debían ser refrendados.
El 29 de febrero del 2000, el Consejo Superior de Deportes del Ministerio de Educación y Cultura publicó la resolución de los estatutos de la FES. Unos meses después, viendo que la aparición en escena de la FES y sus correspondientes actuaciones suponían la anulación de la independencia federativa de la EHSF y su supeditación a un organismo que no funcionaba adecuadamente, la EHSF decidió interponer el 19 de mayo del 2000 un contencioso administrativo ante la Audiencia Nacional, solicitando varias actuaciones de ésta.
Se pretendía la anulación de la resolución del Consejo Superior de Deportes. También se pedía la anulación de determinados artículos de la FES por resultar «inconstitucionales» y elevar al Tribunal Constitucional una cuestión de inconstitucionalidad sobre algunos artículos de la Ley 10/1990, de 15 de octubre, de deporte.
La sentencia de la Audiencia Nacional se hizo esperar, pero llegó el 17 de setiembre de 2002 y fue favorable al recurso. El fallo constataba la existencia de ciertos requisitos incumplidos deliberadamente sobre federaciones deportivas españolas y registro de asociaciones deportivas. Estas irregularidades se concretaban en la falta de inscripción de algunos clubes en los Registros Autonómicos correspondientes y la falta de acreditación documental de la representación conferida por parte de las asambleas generales a los presidentes en ciertos clubes deportivos. Lo que venía a significar que la FES había inscrito unos clubes «fantasmas».
Con esta sentencia, la FES recurrió ante el Tribunal Supremo, quien en octubre del 2007 falló otra vez a favor de la EHSF, con lo cual la FES quedaba anulada. Tras estas trifulcas jurídico-administrativas, ni la EHSF ni la FES pueden presentar selecciones nacionales a competición, y ambas empiezan de nuevo a mover sus hilos y argumentos para ser reconocidas a nivel internacional.
En la actualidad la FES asegura que «ha conseguido regularizar su situación administrativa» y deja claro que «todos los títulos expedidos por la FES continúan teniendo plena validez legal a todos los efectos». A su juicio, «lo que procede ahora es iniciar el proceso electoral que -si todo va bien- concluirá antes de fin de junio con nuevos órganos de gobierno para los próximos cuatro años». También asegura «tener la potestad de organizar los circuitos nacionales en todas las modalidades y categorías».
A la espera de la Europea
¿Y la EHSF? ¿Cómo se encuentra en este momento? Al habla con Jokin Arroyo Uriarte, gerente de la EHSF, nos comenta que están en un momento de impasse, ya que dada la actual inexistencia legal de la FSE han presentado su candidatura una vez más a la Federación Europea mediante carta certificada y e-mail. Hasta el momento no han recibido respuesta y por lo que se ve, están dando largas al asunto. El surf crece año a año y sus repercusiones son cada vez mayores a todos los niveles, incluso al político. Empieza a ser algo más que un deporte y este contencioso es conocido a nivel internacional. Lo que podría ser un ejemplo de reconocimiento y generosidad por parte de la FES hacia la trayectoria anterior y ejemplo de gestión de la EHSF (Gran Bretaña es un ejemplo a seguir en estos casos), se está transformando en una batalla por la consecución del poder único y la supeditación incondicional de la EHSF. Cuando la política entra en el deporte -sobretodo cuando vemos quiénes gestionan la política- al final siempre pagan el precio los deportistas. Y -como en el pago a Hacienda- unos más que otros.