Tras la victoria en Córdoba, nueva derrota
De nuevo sin luz lejos de Ipurua
El Eibar tras un último cuarto de hora horrible encajó cinco goles en Alicante, donde no había perdido en sus últimas seis visitas
Ander GARTZIA | EIBAR
La racha del Eibar, con seis visitas consecutivas a Alicante sin conocer la derrota, terminó de la manera más drástica para el cuadro armero. Los guipuzcoanos se llevaron una manita del Rico Pérez, tras una primera media hora y un último cuarto donde estuvieron perdidos en el terreno de juego. Ahora deberán sumar cuanto antes los puntos necesarios para sellar matemáticamente la permanencia y la tranquilidad.
El partido se puso cuesta arriba desde los compases iniciales ya que, cuando apenas se ha- bían disputado seis minutos, Rubén Navarro hizo subir el primer gol al marcador tras plantarse solo ante Cuellar. El delantero blanquiazul se encontraba en una posición dudosa cuando controló el balón, pero el árbitro dio validez al tanto.
El Eibar no supo reaccionar al gol encajado y los alicantinos controlaron el partido a placer durante la primera media hora. Sólo un centro-chut de Txiki inquieto al rival, que lejos de meterse atrás seguía creando ocasiones y buscando ampliar su ventaja, como así fue. Sendoa, a pase de Rubén Navarro, hizo el 2-0 y dio paso a unos minutos en los que el Eibar pudo encajar el tercero.
Sin embargo, en una jugada a balón parado los armeros aprovecharon para recortar la desventaja gracias a un cabezazo de Biel Medina, que sirvió para que el conjunto de Mandiola volviera a meterse en el choque.
Tras el descanso, el Eibar siguió presionando y buscando el área rival, como hizo en el último cuarto de hora de la primera parte, pero las ocasiones más claras fueron para el Hércules. En el minuto 62 el árbitro no señaló un posible penalti a Mariño en una internada al área armera y, en la siguiente jugada , Sergio estuvo a punto de marcar el tercero.
La sentencia
El Eibar poco a poco fue regalando terreno y los de Goikoetxea no perdonaron. Ion Velez, como previo aviso, estrelló el balón en el cuerpo de Cuellar, que mandó el balón a córner. Tras botarlo, Sergio cabeceó a las redes. Con el 3-1 el Hércules dejó sentenciado el choque y borró del mapa al cuadro armero, que estuvo a punto de recortar diferencias tres minutos después a través de Yague, pero el catalán no llegó por poco a un balón que finalmente despejó Unai Alba.
El último cuarto de hora fue para olvidar. Los alicantinos llegaron una y otra vez a las inmediaciones de Cuellar y dispusieron de claras ocasiones. A quince minutos del final, Mariño, que volvió loca a la defensa armera, transformó un penalti, y Ion Vélez, jugador cedido por el Athletic, cerró la goleada del Hércules al rematar completamente solo un centro de falta.
Tras finalizar el encuentro, pese al duro correctivo, Mandiola señaló que el resultado «ha sido un castigo excesivo. Tengo la sensación de haber hecho muchas cosas bien como para recibir esta goleada».
El entrenador armero subrayó en todo momento que sus hombres nunca perdieron la cara al encuentro y que «hemos estado a un buen nivel, siendo un digno rival del Hércules.». Para Mandiola, la clave del encuentro estuvo en el tercer gol, y admitió que «el último cuarto de hora nos ha sobrado». El técnico de Eibar cree que les faltó pegada arriba.