Según informó ayer el Departamento de Interior en un comunicado emitido en la mañana de ayer, un joven de 21 años de edad ha sido imputado por un delito de violencia de género, después de haber propinado a la víctima, su compañera sentimental, varios tortazos, puñetazos y patadas, e incluso habría llegado a azotarla con un cinturón en varias ocasiones, produciéndole diversas heridas por las que tuvo que ser atendida posteriormente en un centro de salud de Bilbo.

Según la denuncia formulada ante la Ertzaintza por la propia mujer agredida, este episodio de violencia de género se produjo sobre la una de la madrugada de ayer, domingo, en una vivienda ubicada en el barrio de Alde Zaharra de la capital vizcaina.

Tal y como posteriormente relató la joven agredida, en un momento determinado el detenido habría comenzado a insultarla por razones que se desconocen. Los insultos iniciales por parte del detenido, derivaron en una agresión física.

El presunto agresor, según precisa la nota hecha pública ayer por parte del Departamento de Interior, habría «propinado tortazos con la mano abierta en la cabeza» de la víctima, «además de varios puñetazos y patadas».

Según la información ofrecida en la nota, el agresor «hasta ha llegado a azotar a la mujer haciendo uso de su cinturón en repetidas ocasiones», tras lo cual el propio joven ahora detenido habría obligado a la víctima a abandonar el inmueble en el que se produjeron los hechos.

Atendida de los golpes

Una vez en la calle, siempre según fuentes de la Policía autonómica, la mujer agredida dio aviso a los agentes de una patrulla de la Ertzaintza que se encontraba en este entono de Alde Zaharra de Bilbo.

La joven agredida dio cuenta a los agentes de la Policía autonómica de las agresiones verbales y físicas de las que había sido objeto y, después de denunciar la brutal agresión sufrida a manos de su compañero sentimenal, fue atendida de los golpes recibidos en un centro sanitario cercano.

Minutos después que ocurrieran los hechos denunciados, los agentes de la Ertzaintza habrían localizado al presunto autor de los insultos y golpes en el propio inmueble en el que se habrían producido.

Tras identificar al joven, procedió a su arresto bajo la acusación de un delito de violencia de género, a la espera de pasar a disposición judicial.