Desde el pasado 15 de abril la plantilla de Elecqui SA mantiene un paro indefinido de una hora por cada turno y se concentra para denunciar el despido de dos trabajadores, así como el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) presentado por la dirección de la empresa.

El comité de empresa, conformado por tres representantes de LAB, tres de CCOO, uno de USO, uno de UGT y un independiente en representación de personal de oficinas, explicó ayer que la crisis por la que atraviesa Elecqui arrancó en 1993 y obedece a una estrategia de la dirección de crear una empresa paralela, Lehoiko Bihotz, que se ha ido fortaleciendo en la medida que se desmantelaba la original.

Según el comité, el objetivo de esta táctica, de la que responsabilizan directamente a Ricardo Benedí, «dueño de la empresa y presidente de la recién creada Asociación de Empresarios Vascos, es «liquidar Elecqui». De hecho, el comité destacó que «lo único que queda de Elecqui somos los trabajadores». Además de los dos despidos comunicados en abril, los representantes sindicales expresaron su rechazo total al ERE.

Denunciaron que la plantilla sufre «auténtico mobbing» con el agravante de que no ha existido «ni la menor intención» de negociar el citado expediente.

«Desidia» de la Administración

El comité denunció la «desidia» de organismos de la Administración como la Inspección de Trabajo la Delegación de Trabajo «permitiendo a este pequeño dictador hacer lo que le venga en gana, pasando por alto la sustitución de trabajadores en huelga, contratos fraudulentos o la exposición de trabajadores al amianto a sabiendas, sin tomar las meidas obligadas», zanjando estas cuestiones «con una pequeña multa».