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GIRO | Gilberto Simoni venció en la última llegada al Alpe di Pampeago

Tres etapas para comprobar el nivel en la alta montaña

El Passo Manghen, con 23,5 kilómetros de subida, anticipo del final en alto hoy

Joseba ITURRIA | DONOSTIA

El Giro de Italia vivirá en los próximos tres días dos etapas de alta montaña y una cronoescalada que clarificarán la clasificación general a la espera de las últimas tres jornadas decisivas de la gran ronda italiana.

El primer plato de hoy llevará a los ciclistas desde Verona hasta el Alpe di Pampeago, con 195 kilómetros de recorrido. En el segundo la distancia es menor con 155 kilómetros entre Arabba y el Passo Fedaia, más conocido como la Marmolada. Como postre espera el lunes la cronoescalada desde San Vigilio di Marebbe hasta Plan de Corones con 12,9 kilómetros de gran dureza, con un 8,4 % de media y tramos que llegan a presentar unos porcentajes del 20 y el 24 %.

Mayor es la pendiente media del Alpe di Pampeago, cercana al 10%, ya que en poco menos de ocho kilómetros los ciclistas deben superar un desnivel de unos 750 metros. El primer gran final en alto de la prueba además estará marcado por la ascensión del Passo Manghen. Es un puerto de 23,5 kilómetros en el que se pasa desde una altitud de 385 metros hasta los 2.047 en los que está situada la pancarta del premio de la montaña.

Un repóker de favoritos

El último ganador en el Alto Pampeago en el 2003 fue Gilberto Simoni, que llegó a meta con 35 segundos de ventaja sobre Garzelli. Tras su gran actuación en la contrarreloj, el italiano está entre los favoritos de la etapa de hoy ya que acostumbra a ir a más siempre en el Giro. Además en el primer final en alto se va a empezar a ver el nivel en los grandes puertos de todos los favoritos. Se comprobará si Contador está en condiciones de ganar a los italianos y si Ricco y Di Luca están al nivel de los mejores escaladores en puertos más largos. En la primera etapa de montaña del Giro estos tres corredores y Piepoli fueron los mejores y se verá qué hacen hoy estos cinco hombres que a priori forman el repóker de ases para las etapas de montaña.

La etapa de mañana puede marcar todavía mayores diferencias porque en menos kilómetros se tienen que subir puertos muy duros sin tiempo para recuperación. Así los ciclistas deberán superar cuatro altos, el Passo Pordoi, San Pellegrino, Giau y Falzagero, antes de afrontar la última subida durísima al Passo Fedaia.

Ricco cuenta con Piepoli

En esta línea se expresaba Riccardo Ricco cuando declaraba ayer que «el domingo a la tarde sabré si puedo ganar el Giro. Estas son mis etapas y me toca a mí no fallar en ellas. En estas dos jornadas los puertos no van a estar a noventa kilómetros de la llegada. La mejor noticia para mí es que Leonardo Piepoli está mejor tras su caída de hace dos días. Tengo mucha confianza, pero también éstas son las etapas de Gilberto Simoni. Después de su buena actuación en la crono, estoy convencido de que llegará adelante».

Por si no fuera suficiente, la crono del lunes puede marcar diferencias que serán mayores en función de la capacidad de los ciclistas de recuperar tras los esfuerzos del fin de semana. Serán tres días para clarificar quién puede ganar el Giro.

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