El escepticismo marca la consulta en las zonas más afectadas de Myanmar
Pese al desolador panorama que dejó el paso del ciclón Nargis por el delta del río Irrawaddy y Rangún, la Junta Militar birmana celebró la consulta para la reforma constitucional. El escepticimo fue patente entre los votantes, cuya máxima preocupación es la supervivencia.
GARA |
Sin recuperarse del devastador ciclón que asoló el sur de Myanmar a principios de mes, los habitantes del delta del río Irrawaddy y Rangún votaron en el referéndum convocado por la Junta Militar para aprobar la reforma constitucional. La consulta, realizada ya en gran parte del país, fue aplazada a ayer en las zonas afectadas, donde se estima que cerca de 2,5 millones de personas aún no han recibido ningún tipo de ayuda.
La televisión estatal mostró imágenes de damnificados recibiendo de manos de funcionarios las papeletas para votar. El escepticismo, sin embargo, era patente en sus declaraciones.
«Las víctimas del ciclón no tienen ningún interés en votar, no entienden la Constitución y su gran preocupación es subsistir. Pero los funcionarios hace días que van por las aldeas recordándoles que deben votar `sí'», manifestó una joven de Laydaunghan, a las afueras de Rangún. «Mis amigos y yo votaremos que `sí'. Por que si hacemos lo contrario, las autoridades lo sabrán y no queremos problemas», añadió Soei Teca, empleado de oficina. «He votado que `sí' como otros tantos. ¿Qué otra opción tenía?», se preguntó Ko Naing, de 45 años.
Aung Naing Oo, analista birmano exiliado en Tailandia, incidió en que «la primera preocupación de los afectados es sobrevivir. Por miedo de las represalias, los campesinos del Irrawaddy votarán a favor». En los colegios electorales de Rangún, la afluencia de votantes fue escasa durante toda la jornada y en los del delta se desconocía dado que los accesos continuaban bloqueados por policías y soldados. Armados con porras, escudos y gases lacrimógenos, vigilaban especialmente los lugares de reunión de monjes, estudiantes y otros activistas.
Esta consulta es la primera votación que se celebra en Myanmar desde 1990, cuando el LND de la premio Nobel de la Paz, Aung San Suu Kyi, ganó ampliamente las elecciones.
Organizaciones no gubernamentales, por su parte, alertaron del serio riesgo de hambruna dado el bloqueo de la ayuda exterior. «La situación es muy grave, necesitan comida ya, en algunos casos puede ser cuestión de horas. Los pescadores perdieron sus barcos y redes, los campesinos la siembra, semillas y animales. No hay alimento ni tienen forma de obtenerlo», advirtió Franck Vanetelle, de la ONG Acción contra el Hambre.
Los más vulnerables son los niños, que ahora logran comer algo de arroz de las raciones de sus padres. En dos meses, pueden empezar a morir si no fortalecen sus defensas con proteínas y vitaminas.