Kiriyenka ganó la etapa previa a la última jornada de montaña con paso por el Gavia y el Mortirolo
Ricco y Di Luca amenazan la maglia rosa de Contador
Los dos italianos quedan a escasos segundos del madrileño tras atacarle y ser más fuertes en las subidas
Joseba ITURRIA | DONOSTIA
Riccardo Ricco y Danilo Di Luca se colocaron a escasos segundos del liderato de Alberto Contador tras sus ataques en una decimonovena etapa ganada por el bielorruso del Tinkoff Vasili Kiryienka, el más fuerte de una escapada que llegó a alcanzar más de veinte minutos antes de decidir el triunfo en las dos últimas subidas a Presolana y el Monte Pora tras 228 kilómetros.
Junto al bielorruso entraron en la fuga Missaglia (Diquigiovanni), Cummings (Barloworld), Nicki Sorensen (CSC), Ermeti (LPR) y Efimkin (Quick Step). La primera parte se rodó a una gran velocidad hasta formar la fuga y eso, la dureza del passo de Vivione, la intensa lluvia y el frío marcaron el desarrollo de la etapa, cuya parte decisiva comenzó en el descenso del puerto más duro de la jornada, cuando el LPR lanzó un ataque magistral apoyado en la habilidad de Savoldelli para la bajada.
Tras el biganador del Giro salieron su compañero Di Luca y Nibali (Liquigas). El ganador del Giro del Trentino defendía el puesto de Pellizotti y Savoldelli fue el encargado de asumir todo el trabajo en el trío y consiguió abrir enseguida una ventaja de 1.25 sobre el primer grupo del que tiraban Toni Colom y Andreas Klöden, los dos corredores de Astana que apoyaron muy bien a Alberto Contador hasta los kilómetros finales de la durísima etapa.
Ellos consiguieron reducir la diferencia en primera instancia, pero Savoldelli aprovechó un tramo de descenso y el apoyo de Ermeti, al que su director ordenó esperar a sus líderes, y la ventaja de los LPR subió a los dos minutos hasta que Di Luca se quedó solo en cabeza en la penúltima subida a Presolana.
Ataque de Ricco
El ritmo del italiano era superior al que le marcaba Klöden y cuando la distancia se acercaba a la ventaja que tenía Contador, el madrileño recibió la orden de acelerar en la parte inicial de la última subida a Monte Pora sin la fuerza que mostró en el pasado Tour o este año en Euskal Herria. Ricco se dio cuenta de ello y lanzó un ataque que no encontró respuesta del líder y sólo la ayuda de un ex compañero como Van den Broeck, Pellizotti y los Navigare le permitió mantener la maglia rosa por cuatro segundos sobre el del Saunier y 21 con respecto a Di Luca.
Dos italianos que intentarán aprovechar hoy la última gran etapa de montaña para atacar a Contador con los míticos puertos del Gavia y el Mortirolo y la subida a Aprica y sacar una renta que les permita ganar el Giro mañana en una crono de 30 kilómetros en la que el madrileño contaría con una ventaja teórica sobre los italianos.
Riccardo Ricco manifestó al término de la etapa de ayer que «he llegado enfadado porque me ha faltado muy poco para alcanzar la maglia rosa y en el último kilómetro no me entraba el plato grande de 53 dientes y he tenido que hacerlo con el plato de 39. Mucha gente decía que Contador había demostrado que era el más fuerte en subida, pero creo que he ratificado que el más fuerte soy yo porque siempre he estado por delante suyo en la montaña. Pero él siempre encuentra alguien que le ayude, como esta vez Sella y Pozzovivo. Me han dicho que tiraban por detrás y no entiendo por qué. Tenían que haberse limitado a seguir la rueda del líder. Para mañana -dijo por hoy- espero una alianza con Di Luca para poder desbancar a Contador».
El madrileño, por su parte, quiso «felicitar a Danilo y Ricco, que han hecho una bonita etapa y han dejado muy interesante» un Giro que, salvo por la actuación de Alan Pérez y los puestos de Koldo Fernández de Larrea, no ha resultado nada bueno para los vascos. El euskaltel que podía partir con mayores opciones de intentarlo en las etapas de montaña, Dioni Galparsoro, tuvo que abandonar ayer y Juanma Garate entró en el grupeto.
