NaBai debate seguir como está o dar pasos para convertirse en partido
La asamblea de Nafarroa Bai dará este viernes el pistoletazo de salida a un proceso de debate cuyo contenido y desenlace son inciertos. Tras las crisis de los últimos meses, todos sus integrantes afirman estar a favor de potenciar la coalición, pero sólo Aralar parece claramente dispuesto a avanzar hacia su conversión en un partido político. Sin embargo, su propuesta de crear una militancia propia no parece haber calado entre los «independientes».
R.S. |
A cuatro años de su aparición en escena y tras el parón electoral detectado en los comicios del pasado 9 de marzo, Nafarroa Bai abre este viernes un proceso de debate interno cuyo final no está escrito. En la presentación, llevada a cabo ayer por representantes de los cuatro partidos que integran la coalición, quedó de manifiesto que por ahora no está claro cómo se van a tomar las decisiones ni existe siquiera plazo temporal fijado. Por el momento, los partidos van presentando sus propuestas, y se les podrán sumar todo tipo de aportaciones individuales.
Con este objetivo, el pistoletazo de salida lo dará una asamblea abierta a los militantes de Aralar, EA, Batzarre y PNV, y a los «independientes» que forman parte de la coalición. Tendrá lugar este viernes a las 19.00 en Baluarte, comenzará con una intervención de la diputada Uxue Barkos -que hará balance del resultado del 9-M- y le seguirán representantes de cada uno de los cuatro partidos.
A partir de ahí, habrá que ver cómo evoluciona el debate, ante el que todos los implicados se limitan a exponer buenos deseos genéricos. A modo de ejemplo, Maiorga Ramírez, presidente de EA en Nafarroa, dijo ayer que «estamos comprometidos todos desde la ilusión y la convicción de la necesidad de refortalecimiento». Y Patxi Zabaleta, coordinador general de Aralar, añadió que «estamos ante el de- safío de actuar conjuntamente, sin negar nuestras diferencias».
¿Militancia propia?
Pese a la ambigüedad de los discursos de unos y otros -nadie quiere dar la imagen de que no desea fortalecer la fórmula-, la línea general del debate parece clara: está en juego seguir como hasta ahora o dar un primer paso para convertir a Nafarroa Bai en una formación única que en un futuro pueda sustituir a los partidos que la integran.
La propuesta más concreta en este sentido es la anticipada ya por Aralar, que plantea que Nafarroa Bai pueda contar con una «militancia propia» que, además, tomaría el liderazgo, ya que le correspondería el 30% de la representación directa en todos los ámbitos de la coalición, desde la designación de cargos internos hasta la definición de las listas electorales. El 70% restante se lo repartirían Aralar, EA, PNV y Batzarre.
Txentxo Jiménez dejó claro el sábado que sería un primer paso, porque «si este método funcionase, no habría inconveniente en el futuro en reconsiderar los porcentajes».
Según este planteamiento, acceder a la condición de militante de Nafarroa Bai sería una opción libre para los actuales afi- liados de cada uno de los partidos miembros y para los «independientes». Sin embargo, Aralar puede topar con un escollo quizás imprevisto: en los debates previos a esta asamblea, muchos de los «independientes» ya han apuntado que prefieren mantener su estatus actual.
El PNV, teóricamente interesado también en crear una formación estable, no va tan lejos. Se limita a plantear un nuevo esquema organizativo que se base en un nuevo órgano supremo, el Consejo General. Su presidente en Nafarroa, José Angel Aguirrebengoa, afirmó el lunes en compañía de Iñigo Urkullu que abogan además porque NaBai siga siendo una coalición de partidos políticos.
Apuesta por conformar una militancia propia de Nafarroa Bai que tenga el 30% de la representación en todos los niveles. También porque las decisiones se tomen por mayoría. Y quiere que el debate se cierre para octubre.
Por ahora, aboga por mantener NaBai como una coalición de partidos. Sin embargo, quiere introducir cláusulas para que éstos estén obligados a «acatar» los acuerdos tomados por la Permanente de NaBai.
Ambos tienen previsto hacer pública hoy su posición ante el proceso. En el caso de EA, tiene abierto aún un debate interno propio en torno a sus criterios sobre NaBai, por lo que afronta esta reflexión común con un planteamiento abierto.
Tienen libertad para hacer sus propias aportaciones, comenzando por la reunión del viernes. Algunos ya han mostrado recelos frente a la propuesta de Aralar de que se conviertan en militantes de NaBai.
La comparecencia conjunta para presentar este proceso de debate interno se convirtió en una nueva prueba de las dificultades de NaBai para sostener un discurso homogéneo sobre cuestiones como el Tren de Alta Velocidad, en la que los partidos tienen posiciones diferentes en otros territorios. Una periodista pidió a los cuatro partidos presentes que aclararan si la coalición está o no a favor del TAV. Patxi Zabaleta respondió así: «Vamos a ver, esa es una terminología anticuada, que se utilizaba el tiempos del `iluminado' Palacios [ex consejero de Obras Públicas del Gobierno navarro]. Tenemos matizadamente diferentes posturas, pero unos comunes denominadores. Estamos a favor del `tren de altas prestaciones', que es un objetivo al que no acaba de llegar la ultraderecha. Dicho eso, hay que debatir trazados, estructuras y utilizaciones de trazados ya existentes», añadió el coordinador de Aralar.
Maiorga Ramírez (EA) le tomó el turno. Se aferró también a ese concepto de «tren de altas prestaciones», y defendió que ese modelo sí permitiría la utilización mixta, de mercancías y viajeros, que demandan.
Le siguió José Angel Aguirrebengoa (PNV), que añadió que «no entiendo cómo el PSN se calla ante esta utilización interesada del TAV». Para entonces, la cuestión ya había consumido casi tanto tiempo como el resto de la rueda de prensa.
Mientras tanto, Uxue Barkos interpelaba en Madrid al Gobierno español sobre «cuáles son los motivos por lo que no se ha materializado la firma del convenio entre la Comunidad Foral de Navarra y el Estado».
