El portavoz Mike Mena explicó que el cineasta Mel Ferrer murió mientras dormía el pasado lunes, rodeado de familiares y amigos en su hogar en Carpenteria, en el estado de California, cerca de Santa Bárbara.

El alto y delgado autor debutó en Broadway como bailarín de coro en 1938. Tras sufrir la enfermedad de polio, trabajó tras bambalinas en radio, televisión y cine antes de su debut en la gran pantalla en el drama racial de 1949 «Lost Boundaries».

Durante los años 50 su espigada figura pudo ser contemplada en títulos como «The Brave Bulls» (1951) de Robert Rossen, «Encubridora» (1952) de Fritz Lang, «Scaramouche» (1952) de George Sidney, o en la cinta «Los caballeros del Rey Arturo» (1953) de Richard Thorpe, donde encarnó al Rey Arturo.

No obstante, el director es más recordado por su papel como el titiritero en el musical de 1953 «Lili», con Leslie Caron, el mismo año en que Audrey Hepburn debutó en el cine con «Roman Holiday», que le valió un Oscar a la mejor actriz.

Ferrer y Hepburn contrajeron matrimonio en 1954 y aparecieron juntos en la adaptación al cine del libro de León Tolstoy «War and Peace», de 1956, ella como Natasha Rostov y él como el prínciple Andrei Bolkonsky.

Como cineasta, Ferrer dirigió a Claudette Colbert en el misterio de «The Secret Fury», en 1950, y a Hepburn en la aventura romántica de 1959 «Green Mansions», ambientada en la selva de Venezuela.

Pero la pareja disfrutó de una colaboración más exitosa en la cinta de suspense de 1967 «Wait Until Dark», que Ferrer produjo y que fue protagonizada por Hepburn como una ciega perseguida por asesinos buscando su silencio.

Director antes que actor

Entre lo más destacado como intérprete en los años 60, 70 y 80 se encuentran, por ejemplo, la versión de «Las manos de Orlac» (1960), una coproducción franco-británica dirigida por Edmond T. Greville que estaba coprotagonizada por Christopher Lee, la superproducción bélica «El día más largo» (1962), el peplum «La caída del Imperio romano» (1964) que realizó Anthony Mann, la simpática comedia de Richard Quine, «La pícara soltera» (1964), «El Greco», en el que Ferrer encarnaba al propio pintor, «Brannigan» (1975), cinta británica de Douglas Hickox que protagonizaba John Wayne o «Lily Marleen» (1981), título rodado por Rainer Werner Fassbinder, en el cual estaba acompañado por Hanna Schygulla y Giancarlo Giannini.

Mel Ferrer apareció en más de cien cintas de cine y películas para televisión, si bien se veía a sí mismo más como un talento creativo detrás de la cámara que como actor, recordó su hijo.

Su matrimonio con Hepburn, el primero de cinco para Ferrer (estuvo casado dos veces con Frances Gunby Pilchard), terminó en 1968. Su únijo hijo, Sean Hepburn Ferrer, de 47 años, es también cineasta; dirigió el documental titulado «Racehoss» en 2001.