Miles de personas quedaron atrapadas ayer durante dos horas en el Metro de Bilbo, tanto en los andenes como en los convoyes que circulaban por las líneas 1 y 2, debido a una avería eléctrica ajena al servicio que terminó afectando a la subestación del metro de Bolueta, que abastece a Metro Bilbao.

La suspensión del servicio se produjo entre las 9 y las 10.30, y los responsables del metro se vieron obligados a activar un plan de emergencia para desalojar a quienes se encontraban encerrados en las unidades de tren. Según Metro Bilbao, el desalojo, aunque «aparatoso» en el caso de los trenes que se encontraban entre estación y estación, se realizó «en condiciones de total seguridad».

Las mismas fuentes atribuyeron el suceso a las «deficiencias de Iberdrola en el suministro eléctrico», que tuvieron su origen en un fallo registrado en una terminal de Telefónica que, a su vez, repercutió en el suministro eléctrico a la subestación de Bolueta.

Precisaron que no se trató de una caída de tensión, sino de una «sobretensión» que hizo activarse el sistema de seguridad que protege los sistemas electrónicos de Metro Bilbao, con el consiguiente corte de energía generalizado.

Muchos usuarios se quejaron de que nadie les informó de lo que estaba ocurriendo, aunque desde la compañía reconocieron que, al no haber suministro de energía, tampoco hubo medios técnicos para informar a los usuarios, lo que obligó a que la información tuviera qe transmitirse a través de los empleados situados en las estaciones».

Un portavoz de Iberdrola, por su parte, confirmó que la avería tuvo su origen en el fallo de la instalación de Telefónica y que una hora después de registrarse la misma, un 95% de los clientes afectados había recuperado el suministro, que no llegó a reestrablecerse completamente hasta las 10.00, aunque hasta aproximadamente una hora más tarde muchas unidades continuaron paradas.