Los menores extranjeros de Zabaltzen protestan por los nuevos monitores
GARA |
La diputada alavesa de Política Social y Servicios Sociales, Covadonga Solaguren, compareció ayer en Gasteiz para informar del «motín» protagonizado la noche del viernes por los menores extranjeros no acompañados del centro Zabaltzen, según la responsable foral, en protesta por el nuevo proyecto educativo implantado el pasado martes que incluye un «mayor control y vigilancia».
Solaguren atribuyó los hechos al cambio de gestión del proyecto que ha supuesto la incorporación al centro de un nuevo equipo de educadores. El anterior equipo denunció hace una semana la «dramática situación» de los jóvenes por la falta de condiciones mínimas de los servicios y el hacinamiento.
«Los menores han echado un pulso a los nuevos educadores que han querido poner orden con un nuevo proyecto», manifestó Solaguren en referencia a los hechos.
La diputada jeltzale reafirmó su apuesta por el proyecto implantado el martes con el objetivo de «atenderles y proporcionarles una educación integra- dora con valores». El proyecto incluye un «mayor control y seguimiento» del comportamiento de los menores dentro y fuera del propio centro, según dijo, lo que consideró que podría haber generado descontento entre algunos de los menores que «no quieren cumplir las normas mínimas establecidas para el buen funcionamiento del centro», según su versión.
«La autoridad dentro del centro debe estar siempre en manos de los responsables y de sus educadores y los menores no deben determinar el funcionamiento del mismo en ningún caso», dijo Covadonga Solaguren, que definió su mensaje como «tranquilizador».
El primer saludo fue dirigido a los presos y refugiados, especialmente a aquellos que se encuentran en circunstancias más difíciles, como los presos enfermos, con condenas de por vida o en aislamiento.
Askatasuna resaltó que los afectados por la represión son cada vez más, y mostró su solidaridad a todos ellos. Citó a quienes están bajo control judicial, a quienes tiene las cuentas bloqueadas, a los que sufren multas, a los perseguidos y espiados...
El juicio celebrado en Madrid en contra del movimiento pro-amnistía mereció una mención especial, pues, a juicio de Askatasuna, es una clara muestra de que las leyes, después de tanta modificación, tienen como objetivo acallar su voz.
Los anteriores educadores del centro de atención a los menores extranjeros no acompañados denunciaron que éste no cumple unas condiciones mínimas para la integración de los jóvenes.