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Sunny vestirá la camiseta rojilla la próxima temporada
Osasuna y Valencia cerraron ayer la cesión, que podría convertirse en traspaso el próximo año
GARA | IRUÑEA
Se acabó el seudoculebrón con el que amenazaba en convertirse la llegada de Sunny Obayan a Osasuna. Con todos los papeles ya en la mano, el club rojillo cerró ayer con el Valencia la cesión del centrocampista nigeriano -nacionalizado español e internacional sub20 con la rojigualda- hasta el 30 de junio de 2009.
Una cesión que, dentro de un año, podría convertirse en traspaso, ya que Osasuna se reserva una opción de compra, con un precio de 2,5 millones de euros. No acaba ahí el acuerdo, ya que en el caso de que la entidad navarra haga efectiva esta posibilidad, el Valencia tendría también una opción preferencial de recompra durante las dos temporadas posteriores: en caso de recuperar al jugador en 2010, tendría que abonar 3,5 millones y, un año más tarde, la cifra se elevaría a los cuatro millones.
Sunny, que cumplirá veinte años el próximo mes de setiembre, es un centrocampista de corte defensivo que también puede actuar como lateral derecho, y que destaca por una considerable capacidad física, lo que además le permite recuperar muchos balones. En el Valencia, al que llegó el pasado verano, no ha podido hacerse con una plaza fija en el once titular, aunque ha llegado a disputar 16 partidos, diez de Liga, tres de Copa y otros tres en Liga de Campeones.
Más allá de su perfil futbolístico, la historia personal de Sunny parece sacada de una novela. Stephen Sunday Obayan nació en Lagos el 18 de setiembre de 1988. Mientras practicaba en la escuela de fútbol de Taribo West, recibió la llamada de un supuesto agente de futbolistas belga y se decidió a emigrar a Europa, en busca de un futuro mejor. Así llegó, junto a dos amigos, a París, donde no encontró nada de lo prometido.
Los tres decidieron trasladarse entonces al Estado español, donde empezó a cambiar la suerte de Sunny. En las filas de una selección de emigrantes, disputó un torneo frente al Rayo Vallecano juvenil, donde le descubrió Rodrigo Fernández, del Poli Ejido, que se lo llevó de inmediato al club andaluz.
Y así, Sunny pasó de ser un «sin papeles» -logró la nacionalización española, en cuya selección ha jugado ya en categorías inferiores- a disputar la Champions League con el Valencia. Su próxima estación, Osasuna.
Un delantero en la agenda
El nombre del club rojillo, por otra parte, aparece en la numerosa lista de equipos -Getafe, Valladolid, Málaga, Sporting y Recreativo de Huelva- presuntamente interesados en hacerse con los servicios de Jean Beaosejour, un delantero del O'Higgins chileno que en los últimos tiempos destaca también en la selección andina, en cuyo once ha desbancado a Mark González.
El gerente del O'Higgins Pablo Hoffman ha reconocido que existe interés por parte de varios clubes en hacerse con el jugador, cuyo traspaso rondaría el millón de euros.