Chávez y Uribe abren una nueva etapa tras dar por zanjadas las hostilidades
Los presidentes venezolano, Hugo Chávez, y colombiano, Álvaro Uribe, han anunciado una nueva etapa en las relaciones bilaterales tras una cumbre presidencial con la que han dado por zanjada la crisis diplomática que les ha enfrentado durante los últimos ocho meses.
GARA |
Tras un encuentro privado, que se prolongó por espacio de más de tres horas, y que transcurrió sin la presencia de ministros, ni siquiera del personal de seguridad, el presidente venezolano, Hugo Chávez y su homólogo colombiano, Álvaro Uribe, salieron de su reunión en la Refinería de Amuay, a 500 kilómetros al oeste de Caracas, anunciando el comienzo de una nueva etapa de relaciones entre ambos gobiernos y dando por zanjada la crisis diplomática que les ha enfrentado durante casi ocho meses.
«A partir de hoy comienza una nueva etapa. Hemos decidido retomar el camino que vinimos construyendo desde que usted llegó a la presidencia de Colombia (...) vamos a recuperar el tiempo perdido para enfrentar problemas que nos son comunes», manifestó Chávez en una conferencia conjunta ofrecida tras el encuentro.
Uribe, por su parte, agregó que en adelante queda que «las cancillerías y embajadas» de los dos países inicien una «muy acelerada dinámica» para recuperar el tiempo perdido en materia de cooperación bilateral.
La crisis diplomática que ha enfrentado a ambos gobiernos arrancó el pasado 22 de noviembre, cuando Uribe suspendió la mediación para el canje de rehenes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FARC) por gerrilleros presos, que desde el mes de agosto venía desarrollando el presidente venezolano junto a la senadora colombiana opositora Piedad Córdoba.
El incidente dio lugar a una escalada de ataques entre ambos Gobiernos que incluyó insultos, la suspensión temporal del comercio bilateral y la retirada de los embajadores.
Uribe, por su parte, reiteró su deseo de reanudar también relaciones con Ecuador, rotas desde marzo tras el ataque militar colombiano en territorio ecuatoriano. A este respecto, Chávez expresó su disposición a mediar para lograr la reconciliación entre Bogotá y Quito.
Por otra parte, el Gobierno venezolano se hizo ayer con el «total control operativo» de Sidor, tras alcanzar un «acuerdo amistoso» con el grupo argentino Techint para determinar, en un plazo de dos meses, el precio que el Estado pagará por su paquete mayoritario del 60% del capital. Chávez reiteró que la siderúrgica pasará a convertirse en una «empresa socialista», cuyas millonarias ganancias «se quedarán en Venezuela».
El presidente de Ecuador, Rafael Correa, ratificó su negativa a reanudar relaciones diplomáticas con Colombia mientras su homólogo Álvaro Uribe lidere el Gobierno de ese país.