«Al menos 66 guerrilleros tamiles y dos soldados murieron ayer», según el Gobierno, después de que el Ejército de Sri Lanka bombardeara y atacara a la guerrilla tamil. De este modo, confirma el rechazo del Gobierno al alto el fuego declarado por la guerrilla tamil Tigres para la Liberación de Tamil Eelam (LTTE).

La guerrilla tamil había anunciado el alto el fuego con el objetivo de «facilitar la celebración en Sri Lanka de la cumbre de la Asociación para la Cooperación Regional de Asia del Sur (Saarc)». El secretario de Defensa de Sri Lanka justificó el ataque porque a su juicio, «el anunció de tregua es una estratagema del LTTE porque se está quedando debilitado en el frente de guerra». Aseguró que el Gobierno no necesita una tregua con el LTTE.