Eguzki ha constatado que el servicio de Renfe en Gipuzkoa sigue siendo «deficiente»
Eguzki elaboró en enero un estudio para valorar la situación de la red de cercanías de Renfe. Seis meses más tarde han vuelto a repetir el examen y han constatado que no se ha mejorado en ninguno de los aspectos denunciados. Este organismo denuncia el abandono existente.
Maider EIZMENDI |
La organización ecologista Eguzki compareció ayer en la estación de Renfe de Donostia para hacer públicos los resultados del último estudio que ha realizado con el fin de evaluar el servicio que ofrece esta compañía ferroviaria.
El pasado enero realizaron otro estudio similar que «dio como resultado una valoración negativa al servicio que Renfe presta en Gipuzkoa». En este nuevo examen «desgraciadamente» han constatado que «las deficiencias siguen caracterizando a cercanías de Renfe-Gipuzkoa».
Los representantes de Eguzki Juan Mari Beldarrain y Arantxa Ozio afirmaron que en enero «la accesibilidad a estaciones y apeaderos era bastante deficiente; 12 estaciones presentaban obstáculos arquitectónicos para personas con minusvalías físicas, movilidad reducida, coches de niños...». Seis meses más tarde, «en ninguno de esos casos se han resuelto los problemas de acceso a la estación».
En cuanto a la accesibilidad al tren, señalaron en su día que el hueco entre el andén y vagón era excesivo e imposible para minusválidos con necesidad de silla de ruedas. En este aspecto, «tampoco ha habido ninguna actuación que mejore la accesibilidad». Precisamente, a raíz de la denuncia que hicieron, la propia Renfe anunció la puesta en servicio de trenes Civis con accesos adaptados, «pero todavía a Gipuzkoa no han llegado».
También se han parado a analizar otros aspectos, como el cruce de vías, que «sigue siendo peligroso» en 18 apeaderos. «En el momento de la denuncia citábamos un doble atropello mortal en Urnieta, lamentablemente en el tiempo transcurrido desde entonces, se ha dado otro atropello mortal en Hernani, así como la muerte de un supervisor de seguridad laboral en Alegi-Tolosa, con lo que se constata que la mejora en seguridad no sólo no se ha dado sino que se podría decir que ha empeorado», subrayaron.
En definitiva, consideran que el servicio de cercanías de Renfe «sigue siendo impropio del siglo XXI y manifiesta un evidente abandono, con serios obstáculos de accesibilidad, riesgo y escasa oferta de servicios, a pesar de la propaganda sobre las virtudes de dicho medio de locomoción». Prosiguieron diciendo que «siete meses después Adif, Renfe y el Ministerio de Fomento siguen empeñados en malgastar miles de millones en un tren de alta velocidad que usarán unos pocos ciudadanos, mientras el tren de cercanías, que diariamente usan más de 25.000 guipuzcoanos, sigue languideciendo».
El informe de Eguzki recoge que de los 58 andenes, «16 siguen ofreciendo una cobertura escasa o nula». Asimismo, afirman que algunas estaciones ofrecen «una imagen de abandono y suciedad manifiesta».
«Siguen empeñados en malgastar miles de millones en un tren de alta velocidad que usarán unos pocos ciudadanos, mientras el tren de cercanías, que cada día usan 25.ooo guipuzcoanos, sigue languideciendo».