Miles de miembros de la minoría étnica hazara de Afganistán se concentraron ayer en la periferia de Kabul antes de desfilar, en un ambiente tenso, por las calles de la capital para denunciar la muerte de nueve personas y el desplazamiento de centenares de ellas a raíz de los ataques de los nómadas kochi en la provincia de Wardak tras su entrada en tierras hazaras del distrito de Behsud.

Cientos de policías antidisturbios fueron desplegados en la zona para controlar el desarrollo de la manifestación, mientras el numeroso servicio de orden de la organización trataba de contener la ira de los hazaras.

Los manifestantes exhibieron carteles y pancartas en las que exigían «justicia para el pueblo hazara», en dari e inglés. La pancarta que encabezaba la marcha rezaba: «Los kochi deben desarmarse, igual que las demás naciones de Afganistán».

Los hazaras son una minoría chiíta de origen mongol, mientras que los kochi son pastunes que se desplazan a través de Afganistán, en función de las estaciones, buscando pasto para sus animales. Sus enfrentamientos regulares evidencian las tradicionales tensiones entre nómadas y sedentarios.

Invasión de tierras

«Hemos venido a denunciar la invasión de nuestras tierras, en el centro de Afganistán, por parte de los nómadas kochi. El Gobierno debe hacer algo para resolver el problema», declaró Akram Gizabi, portavoz del Movimiento civil de Afganistán.

«En el distrito de Behsud de la provincia de Wardak (a 100 km al este de Kabul), los kochi han destruido estas últimas semanas nuestras casas, devastado nuestros campos y matado a nueve personas, entre ellos cuatro niños», añadió.

Uno de los organizadores, Kazim Wahidi, del Comité de Defensa de la Dignidad del Pueblo, estimó que en la protesta participaron 80.000 personas. La Policía dijo no estar en condiciones de dar una cifra. El portavoz del Ministerio afgano de Interior, el general Zemaraï Bashary, que dijo desconocer cuántas personas han muerto en los enfrentamientos en Behsud, afirmó que la marcha transcurrió de forma pacífica.

En la provincia de Bamyan hubo también manifestaciones.

Desde hace ocho días, uno de los principales líderes hazaras, Mohammad Mohaqiq, mantiene una huelga de hambre para denunciar los ataques de los nómadas kochi.