La Fed deja los tipos en el 2% ante el bajo ritmo económico y la inflación
La delicada situación de la economía llevó ayer a la Fed -Reserva Federal de EEUU- a mantener los tipos de interés en el 2%, una decisión por la que hace escasamente un mes no apostaban los analistas, quienes auguraban una subida del precio del dinero. La medida rompe con los recortes consecutivos iniciados en setiembre, cuando los tipos estaban en el 5,25%. En Europa también prevén que el BCE mantenga inalterados los tipos en su reunión de mañana.
GARA |
La Reserva Federal de Estados Unidos sustentó en la elevada inflación, el bajo ritmo de crecimiento económico, la «debilidad» de los mercados laborales y las «tensiones considerables» existentes en el ámbito financiero su decisión de mantener los tipos en el 2%.
La medida se adoptó por mayoría, ya que nuevamente fue imposible lograr la unanimidad de sus miembros. El presidente de la Reserva Federal de Dallas, Richard W. Fisher, votó en contra de mantener los tipos al considerar necesaria una subida del precio oficial del dinero.
El Comité de Mercado Abierto, en su comunicado, reconoció que «la actividad económica se expandió en el segundo trimestre», aunque lo atribuyó en parte al crecimiento del gasto de los consumidores y de las exportaciones. Pero puntualizó que «los mercados laborales se han debilitado y los mercados financieros continúan bajo tensiones considerables».
El organismo presidido por Ben Bernanke señala que la flexibilización sustancial de la política monetaria, junto con las medidas para fomentar la liquidez, deberían ayudar a «promover un crecimiento moderado».
Respecto a la inflación, prevé que, a pesar de que ha estado elevada por los precios de la energía y algunos otros productos básicos, se modere a finales de este año y del próximo, aunque con unas perspectivas «muy inciertas». «Aunque los riesgos de crecimiento se mantienen, los riesgos alcistas de la inflación son una gran preocupación para el comité», señala.
Revisión a la baja
La economía creció un 1,9% entre abril y junio de 2008, frente al 0,9% del primer trimestre, mientras que el Departamento de Comercio revisó a la baja el dato del cuarto trimestre de 2007, hasta el -0,2%, frente al 0,6% publicado anteriormente, lo que supone el peor registro desde 2001, cuando la economía de EEUU entró en recesión.
Asimismo, la economía de EEUU destruyó 51.000 empleos durante el mes de julio y acumula un recorte de 463.000 puestos de trabajo en lo que va de año, mientras que la tasa de paro de registró una subida mensual de dos décimas y se situó en el 5,7%, su nivel más elevado desde marzo de 2004.
También el BCE
En Europa, los analistas prevén que el Banco Central Europeo (BCE) deje inalterados los tipos en el 4,25% en su reunión de mañana. La institución monetaria elevó un cuarto de punto los tipos en julio para evitar un aumento de la inflación en los quince estados de la zona euro. Ese mes, la inflación alcanzó una nueva marca y se situó en el 4,1% empujado por la subida de los precios del petróleo y los alimentos, cuando el objetivo del BCE es de algo menos de 2%.
El presidente del banco central de Holanda, Nout Wellink, subraya que «nuestra primera responsabilidad es controlar la inflación». Pero el BCE debe tener otro factor en cuenta: mientras que la crisis financiera dura ya un año, se oscurecen las perspectivas de crecimiento en zona euro a tenor de lo que reflejan distintos indicadores. Los analistas no excluyen una recesión, es decir, dos trimestres consecutivos de retroceso del PIB.
Ahora bien, una nueva subida de los tipos podría dificultar un poco más el crecimiento. Así 33 de los 46 analistas encuestados por Dow Jones Newswires auguran que los tipos se mantendrán sin cambios hasta final de año, mientras que diez predicen un nuevo aumento de 25 puntos básicos. Sólo dos de ellos esperan un recorte.
Si los pronósticos se centran en 2009, las divergencias son mayores. «Consideramos que habrá un nuevo aumento de 25 puntos básicos en setiembre, pero si la inflación no aumenta en agosto o si los indicadores de actividad se deterioran mucho, las oportunidades de una subida, disminuyen», indica Sunil Kapadia, analista de UBS.
Nick Kounis, de Fortis, comparte la misma opinión, pero observa que todo pronóstico es difícil antes de la publicación en setiembre de las nuevas previsiones del BCE sobre el crecimiento y la inflación.
Su homólogo de Bank of América Holger Schmieding mantiene la opinión contraria. Jürgen Michels, analista en Citi- group, también cierra las puertas a una nueva subida de tipos. Para él, un retroceso económico hasta podría obligar al BCE a reducir sus tipos.
El FMI admite la dificultad de la posición del Banco Central Europeo (BCE) a la hora de hacer frente a las presiones inflacionistas en un entorno de desaceleración económica. Reitera que el crecimiento de la zona euro sufrirá una «considerable» ralentización este año y que sólo recuperará la tendencia hacia la «reaceleración». De acuerdo con los datos contenidos en la última actualización del informe de la institución internacional sobre la eurozona, el bloque del euro crecerá un 1,7% en 2008 y un 1,2% en 2009, mientras que la inflación se situará en el 3,4% este año, para aliviar la presión en 2009, cuando caerá hasta el 2,4%. Por su parte, las previsiones para la tasa de paro de la eurozona estiman un desempleo del 7,3% en 2008 y una décima más en 2009.
La economía de la zona euro está siendo presionada por una selección de «shocks» que están provocando una desaceleración de la actividad y un «incómodamente alto» nivel de inflación, señala el informe del FMI.
Berlín mantiene su previsión
Esos factores no inciden en la economía alemana a tenor de las previsiones del Gobierno, que mantiene sus pronósticos de crecimiento económico para este año y el siguiente, en 1,7% y un 1,2%, respectivamente, por considerar que no se prevé un retroceso en la coyuntura.
«No hay motivos para cambiar las previsiones de crecimiento económico», indicó el viceportavoz del gobierno, Thomas Steg, quien salió así al paso a la previsiones negativas de algunos expertos, advirtiendo de los efectos en la economía de la mala coyuntura internacional.
Ayer mismo, ``Financial Times'', citando fuentes gubernamentales sin identificar, aseguró que la economía alemana podría haber sufrido una contracción del 1% en el segundo trimestre del año, lo que implicaría una desaceleración mucho más acusada de lo previsto.
«La contracción de la economía será de una magnitud del orden de menos un punto porcentual», indicó un funcionario del Gobierno que declinó ser identificado.
Los precios de los limones, el aceite y la harina, que siguieron subiendo en julio, acumulan en un año aumentos del 64,2% en el primero de los casos, del 47,1% en el segundo y del 31,3% en el tercero.
Además, según el Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, en los últimos doce meses los espaguetis han subido el 26,6%; la leche, el 21,8%o; las naranjas, el 15,5% y el arroz algo más del 14%, mientras que las sardinas, el pan de molde y las bacaladillas lo hicieron más del 13%.
Por debajo de este porcentaje se situaron las subidas de las acelgas, la mantequilla y la bollería, que incrementaron sus precios más del 12%, y las del pollo, los huevos, los yogures y los tomates, que lo hicieron entre el 10% y el 12% desde julio del pasado año. Con aumentos de entre el 6% y el 10% figuran la pescadilla, las salchichas, las gambas congeladas, y el chocolate. Frente a esas subidas, en los últimos doce meses el abaratamiento más destacado es el de las cebollas, cuyo precio bajó el 9,75%, seguido de los pimientos verdes y las anchoas, que se redujeron algo más del 5%, y del aceite de oliva y las judías verdes, con más del 3%.
Los datos correspondientes sólo a julio muestran que subieron sobre todo las gambas (10,6%), el jamón cocido (6,6%), la merluza congelada (5,7%) y las naranjas (4,8%). A continuación, con una subida algo superior al 2%, se situaron, los limones y las manzanas, y con un alza de entre el 1% y el 2%, el aceite de girasol, el arroz, la harina, la pescadilla, la bacaladilla, las patatas, las acelgas, los tomates y las zanahorias.
Los principales abaratamientos registrados el pasado mes fueron los de las anchoas, cuyo preció bajó el 7,5%, seguido de las chirlas (4,55%), los pimientos verdes (3,8%), las judías verdes (3,5%) y el jurel (1,49%), mientras que el resto de las bajadas no llega al 1%.
En Estados Unidos se han destruido 51.000 empleos en julio. Acumula un recorte de 463.00 puestos de trabajo en el primer semestre del año. El paro se sitúa en el 5,7%, su nivel más alto desde marzo de 2004
Los analistas prevén que el BCE mantenga inalterables los tipos en el 4,25% en su reunión de mañana. El FMI subraya la dificultad de hacer frente a la inflación en un entorno de desaceleración económica
El precio del crudo de Texas bajó ayer un 1,8% y el barril cerró a menos de 120 dólares, el menor precio en tres meses. El barril de Brent, de referencia en Europa, rebajó su precio casi tres dólares, hasta los 117,70 dólares
El banco británico Northern Rock, nacionalizado en febrero tras sufrir una crisis de liquidez, obtuvo en los seis primeros meses del año unas pérdidas atribuidas netas de 746 millones de euros y prevé continuar en números rojos hasta 2011.
El banco ha devuelto 11.852 millones de euros del préstamo que recibió del Gobierno de Londres como parte de su plan de viabilidad, y aún le resta por pagar otros 22.072 millones.
El presidente del Northern Rock, Ron Sandler, afirmó que, «como se indicaba en el plan», el banco registrará «pérdidas significativas» en 2008, y añadió que prevé que se mantenga en números rojos hasta 2011 debido al plan de reestructuración y a que el entorno crediticio «sigue estando difícil». Sin embargo, afirmó que la entidad se encuentra por delante de los plazos marcados por el plan de viabilidad para la devolución del préstamo -antes del término de 2010- y agregó que espera que comience a recoger beneficios a partir de 2012.
Northern Rock es uno de los bancos rescatados por un gobierno, una acción que según pronostica el ex presidente de la Reserva Federal de EEUU Alan Greenspan se repetirá con mayor asiduidad. El que fuera máximo responsable de la política monetaria estadounidense y al que numerosas voces acusan de inducir la burbuja de crédito que ha provocado buena parte de los actuales problemas económicos mundiales afirma, en un artículo en ``Financial Times'', que sólo se produjo una «aparente estabilidad» cuando entidades como Northern Rock o Bear Stearns recibieron el respaldo público. «Puede haber numerosos bancos y otras instituciones financieras que, ante el riesgo de impago, terminarán siendo rescatados por los gobiernos», señala Greenspan.
Asegura que «el edificio económico, capitalismo de mercado, que ha promovido esta expansión está siendo ahora puesto en la picota. La causa de la actual desesperación económica, no obstante, es la propensión de la naturaleza humana para pasar del temor a la euforia y viceversa, una circunstancia que ningún paradigma económico ha sido capaz de suprimir sin graves dificultades», manifiesta el ex presidente de la Fed. Greenspan asevera que «la regulación nunca fue capaz de eliminar las crisis en la historia».