Crónica | Aste Nagusia de Donostia
Tai Chi, una técnica oriental para buscar armonía y serenidad en medio de la fiesta
Lentitud, flexibilidad, circularidad, continuidad, suavidad y firmeza son actitudes que transmiten armonía y serenidad. Es el Tai Chi Chuan, un arte marcial chino. Mediante esta técnica observamos la unión de la conciencia y el movimiento corporal. Por los beneficios que aporta su práctica a la salud, se ha hecho popular en la sociedad. Aunque sea en un marco aparentemente tan diferente como las fiestas.
Janire ARRONDO
El Tai Chi está de moda. Este hecho puede deberse a que su práctica no se limita ni con edades ni con condiciones físicas. Durante la Aste Nagusia de Donostia, casi a diario, en Altza y Amara Zaharra están impartiendo clases de iniciación. Ayer era el turno de Amara Zaharra, y en total unas 60 personas, hombres y mujeres de todas las edades, probaron esta técnica de relajación. Según afirmó Loli, una de las asistentes, «siempre he tenido curiosidad por estas cosas, y he venido con intención de aprovechar la oportunidad».
La primera sesión del curso de iniciación al Tai Chi la impartieron el martes. Hubo quienes se quedaron con ganas de aprender más en torno a esta técnica, y ayer, esperaban impacientes a que comenzara la sesión. Se les sumó gente que pasaba por la plaza Easo y no pudo aguantar la tentación de unirse al grupo. Es el caso de Ainhoa, que volvía a casa con su hija de siete años y explicaba que «al ver tanta gente aquí, he picado».
Aunque este tipo de cursillos son cada vez más habituales, mucha gente dice no tener tiempo para hacerlos. «Así es más fácil de probar, ir a un gimnasio cuesta más», decía Loli.
Fueron también muchos los que se paraban a mirar. Aunque no se animaban a realizar los ejercicios que dirigia el profesor, sí escuchaban los consejos que éste daba.
De China a Donostia
El Tai Chi Chuan es un arte marcial originario de China. El principal objetivo de esta disciplina oriental es lograr la evolución del cuerpo y la mente, y conseguir un adecuado equilibrio interno, sin dejar de lado la naturaleza de arte marcial de esta disciplina. El Tai Chi es un descendiente del Tai Chi Chuan, y ha prescindido de la función marcial. Esta actividad se limita a las técnicas y principios relacionados con la meditación.
Según la cultura china, tiene tres fundamentos principales. Por un lado, sintetiza varias formas o esquemas de la lucha de las artes marciales de la dinastía Ming. Más concretamente, está relacionado con las 32 formas de boxeo largo. Por otra parte, esta disciplina recoge la gimnasia taoísta y su sistema de respiración, y algunas teorías de la medicina tradicional. En tercer lugar, formula sus principios de lucha en clave a varias teorías como Yin y Yang, Las Cinco Fases, la Alquimia Interna y el Libro de los Cambios.
Hay documentos clásicos, que se refieren con frecuencia a los seguidores de los estilos de artes marciales Yang y Wu. La terminología utilizada en estos textos se puede entender únicamente conociendo conceptos del arte marcial, de la medicina y la filosofía china.
Algunos pensarán que ésta no es la forma más tradicional de disfrutar de unas fiestas populares -desde luego nada que ver con actos como el abordaje pirata al puerto de Donostia- pero cada cosa tiene su público, como quedó de manifiesto ayer en Amara Zaharra.
