CR�TICA teatro
Petardos de mecha corta

Carlos GIL
En la oferta de humor de la Aste Nagusia, vemos, en dos d�as consecutivos, dos espect�culos unipersonales que nos dan noticias de dos maneras de afrontar el trabajo de payaso, la relaci�n con los espectadores, la intensidad de los contenidos y la propia visi�n del mundo.
El primero de ellos est� protagonizado por Mr. Wilson. Con la nariz roja, de borrach�n, maquillada, se nos presenta como un ser entra�able, incapaz de hacer ning�n n�mero pero que, seg�n cuenta, est� elegido por el Ministerio de Cultura franc�s precisamente para ofrecer este tipo de espect�culos. Utensilios de la vida cotidiana, mezclados con rudimentarios aparatos de trileros o de malabaristas, con resultado de destrucci�n de aquello que molesta, una bondad aparente que esconde una cierta violencia, y que se basa en el carisma del int�rprete y su personaje, tierno, perdedor, que provoca la empat�a.
La otra versi�n la proporciona Alejandro Lucas, que es el que firma la dramaturgia, la interpretaci�n y la puesta en escena de �Destroyer, cabaret de s�tano�, que tiene el subt�tulo de �S�lo para clown psic�tico�, y que es justo lo contrario: una buena puesta en escena, ideas brillantes, momentos corrosivos, la utilizaci�n de su cuerpo como material esc�nico y transgresor, la nariz negra, ambiente en ocasiones macabro, con dosis de crueldad, que pone un espejo a la parte oscura de cada cual con un humor muy neur�tico, y que se queda siempre en el apunte, sin llegar a dar. La concepci�n es buena, los textos tienen br�o, pero el int�rprete logra la comuni�n necesaria con el p�blico.
En ambos espect�culos aparecen petardos. Es la �nica coincidencia entre uno y otro.