El consumo de gasóleo, el carburante más demandado en el Estado español, durante junio fue de 1,6 millones de toneladas, cifra que representa una caída del 10,1% respecto al mismo mes de 2007, según los datos del Ministerio español de Industria, Turismo y Comercio.

El elevado precio del petróleo ha llevado a los carburantes a alcanzar sus máximos históricos y ha provocado, junto con la desaceleración económica, una moderación en el consumo de todos los productos petrolíferos excepto el queroseno.

En junio la demanda de gasolinas retrocedió el 10,2%, hasta las 521.000 toneladas, la de fuel-óleos el 6,4% (953.000 toneladas) y la de gases licuados del petróleo (GLP) -butano, propano, etc- el 3% (118.000 toneladas).

Por el contrario, el consumo de querosenos ascendió a 491.000 toneladas, lo que representa una subida del 3,7%. La demanda conjunta de productos petrolíferos en junio fue de 5,7 millones de toneladas, un 7,9% menos que en el mismo mes de 2007. En los seis primeros meses del año el consumo de productos petrolíferos ascendió a 36,3 millones de toneladas, un 1,6% menos.

El gasóleo, que representa el 49% del total del consumo de productos petrolíferos, bajó el 2,6%; las gasolinas, el 6,2%; los GLP, el 4,3%, y los fuel-óleos, el 0,9%.

Escalada del crudo

En el primer semestre el precio medio del barril de crudo Brent fue de 112,57 dólares, un 72,6% más que en el mismo periodo de 2007. Marcó su máximo histórico a mediados de julio (147,5 dólares por barril), mes en el que cotizó a una media de 133,18 dólares.

La demanda de gas natural en junio de 2008 fue de 34.761 gigavatios-hora (GWh), un 8,8% más que en junio de 2007.