Una película africana recuerda en Venecia la violenta historia de Etiopía
GARA | VENECIA
La película «Teza», del etíope Haile Gerima, proyectada ayer en competición en la Mostra de Venecia, es un filme que trata sobre la reciente y violenta historia de su país, pero ante todo de la ignorancia.
Gerima, profesor emérito de la Universidad Howard de Washington, cuenta la historia de Anberber, un intelectual africano exiliado en Alemania que regresa a su país durante el régimen marxista de Haile Mengistu. Anberber, interpretado por Aron Arefe, regresa a casa con su madre en un pequeño pueblo etíope tras un incidente que no recuerda, pero que le ha costado la amputación de una pierna.
La recuperación de la memoria le guía a través de su historia y la de Etiopía y sirve a Gerima para mostrar «la impotencia de los intelectuales ante la desaparición de los valores humanos y sociales» en los regímenes totalitarios. «Teza me ha dado la oportunidad de contar la historia de los intelectuales africanos que se encuentran dislocados por una serie de complicadas circunstancias históricas», aseguró Gerima. En dos horas y veinte minutos, Gerima se recrea en la historia, porque el cine es una de sus pasiones, ya «mi padre y mi madre ya eran narradores de cuentos».
Quienes también emplean dos horas para intentar contar su historia son los directores Aleksei German, en su «Bumaznyj soldat», y Werner Schoeter en su «Nuit de chien», otras dos películas vistas ayer en concurso en Venecia. El ruso German cuenta la vida del médico encargado de designar los astronautas que viajarán en el primer vuelo tripulado al espacio, una decisión que se le hace insoportable porque está convencido de que no regresarán. German se ha basado en la novela «Para esta noche», de Juan Carlos Onetti. Igualmente, Schroeter, privilegia más la forma que el contenido en una película en la que un hombre en la cuarentena busca a una mujer en una guerra civil de ambiente futurista, pero con la narrativa de Fassbinder. Schroeter dijo que la película pretende mostrar cómo «en situaciones límite, la gente pierde los principios» y cómo «la única salida a una situación sin salida es la utopía».