El Ejército sudanés mató a un número indeterminado de personas en ataques aéreos y terrestres contra dos bases de milicianos en la región de Darfur del Norte. Dirigentes de tres grupos afirmaron que las tropas atacaron sus bases en Disa y Birmaza con el apoyo de milicias, helicópteros y aviones Antonov, «desde los que nos han disparado y bombardeado. Tienen con ellos a muchos milicianos a camello y caballo. Muchos civiles han huido de la zona», subrayó Ibrahim al Helwu, del Movimiento para la Liberación de Sudán».