El PNV apuesta por el pacto presupuestario pese a las descalificaciones del PSOE
Mientras mantienen abierta con el PSOE la polémica en torno a la Ley de Consulta, con descalificaciones que suben de tono día a día, los portavoces del PNV no dudan en compaginar ese discurso con el del acercamiento a un acuerdo presupuestario con Madrid.
GARA |
Al menos hasta el 15 de setiembre, si el Tribunal Constitucional español no hace público antes su fallo sobre la Ley de Consulta, PNV y PSOE mantendrán un escenario al que estos dos partidos ya han acostumbrado a la ciudadanía vasca: mientras por un lado airean sus supuestas desavenencias insuperables en ciertos temas, por otro se disponen a sellar su enésimo acuerdo en materia presupuestaria. Actitud que el partido jeltzale también mantuvo durante la etapa en la que José María Aznar residía en La Moncloa.
Tanto unos como otros dieron ayer una nueva muestra de que pueden llegar a un punto de encuentro pese a que, en el punto de partida, parezca que sus proyectos viajan en sentido opuesto. Muestra de ello fueron los discursos de Andoni Ortuzar y Josu Erkoreka durante el acto del XXX aniversario del batzoki de Erandio Goikoa.
El diputado en el Congreso español comenzó descalificando al presidente del Gobierno español: «Lo que nos pide el cuerpo es pagarle a Zapatero con la misma moneda, acorralarle, acosarle e impedirle gobernar y hacerle imposible que apruebe los presupuestos». Pero a continuación volvió a constatar que el PNV busca otra cosa: «Sacar una tajada suficiente como para justificar el apoyo a los presupuestos».
En ese punto dirigió sus críticas a la izquierda abertzale por acusar al PNV de «construir España» en lugar de aportar a la construcción de Euskal Herria. «Votar a favor de un presupuesto a cambio de traer inversiones para Euskadi, mejorar las in- fraestructuras, la tecnología, aumentar la inversión en investigación y desarrollo y aproximarnos a los países mas prósperos de Europa para afrontar la crisis, yo creía -añadió- que eso era construir Euskadi, no construir España».
«Bueno, bonito y caro»
Ortuzar subió el tono en las acusaciones a Zapatero, incluso para asumir que éste «juega» con el PNV «con una desvergüenza total; lo mismo nos quieren meter a la cárcel y tienen al lehendakari enjuiciado que luego apelan a nuestra responsabilidad para sacar sus presupuestos, y lo hacen con la desfachatez de decir que ellos se brindan para darnos su apoyo aquí, cuando nosotros no necesitamos su apoyo, sino que el problema lo tienen ellos».
A renglón seguido, el presidente del BBB advirtió al Gobierno del PSOE que, en esta ocasión, un posible acuerdo presupuestario no va a ser «bueno, bonito y barato», sino «bueno, bonito y caro, porque Euskadi necesita ponerse al día en muchas cosas también».
«Si no nos quieren dar las transferencias, tendrán que invertir en este país. Si no quieren que nosotros nos emancipemos, tendrán que meter dinero aquí, no vamos a ser nosotros más blandos que sus correligionarios catalanes, porque para blandos, ya tenemos a los socialistas aquí», comentó.
Pese a esas referencias a Catalunya, a lo que no hizo mención Ortuzar fue al hecho de que, precisamente, es la actitud de CiU, con su negativa de partida a apoyar los presupuestos del Estado, la que ha otorgado a los escaños del PNV un peso relativamente mayor en las Cortes españolas.
CiU, que pactó con Zapatero la reforma del Estatut de espaldas a PSC y ERC, acusa ahora al presidente español de no cumplir aquel acuerdo al plantear una insuficiente financiación en materias claves para Catalunya.
Txarli Prieto, líder del PSE en Araba, afirmó que el tripartito ya se ha percatado de que ha estado «haciendo el indio» con la Ley de Consulta y ha asumido que el recurso ante el Tribunal de Estrasburgo es inviable.
Josu Erkoreka, diputado jeltzale en Madrid, aseguró que «lo que nos pide el cuerpo es pagarle a Zapatero con la misma moneda, acorralarle, acosarle e impedirle gobernar». Sin embargo, lo que buscará es el acuerdo.