La dimisión forzada del presidente de Sudáfrica, Thabo Mbeki, ha suscitado muchos interrogantes en Zimbabwe cuando no termina de concretarse un acuerdo de reparto de poder logrado precisamente por su mediación.

Ironías del calendario, Mbeki fue forzado por la ANC a dimitir el pasado fin de semana, justo siete días después de arrancar un acuerdo calificado de histórico en el vecino país africano.

El presidente zimbabuo, Robert Mugabe, y su rival, Morgan Tsvangirari, aceptaron el 15 de setiembre un principio de acuerdo para poner en marcha un gobierno de unidad nacional. Diez días después de su firma, el acuerdo sigue siendo papel mojado y las dos partes no consiguen llegar a un acuerdo sobre el reparto de carteras en el futuro Ejecutivo.