A finales de la década de los ochenta en Hollywood, California, Jim Wilson (futura voz y guitarra) trabaja en Tower Records en Sunset Boulevard. Un buen día aparece un nuevo empleado que lleva una chaqueta con unas tachuelas a la espalda que componen el nombre de Kiss. Su nombre, Jason Mackenroth, percusionista. Pasados unos meses, Wilson presenta a Mackenroth a su amigo Marcus Blake, bajista. En unos días los tres amoldan sus deseos y comienzan a ensayar en un lugar próximo al trabajo.

Tras las primeras demos y el habitual trasiego con ellas, Wilson comienza a trabajar en otra tienda de discos menos exigente con los horarios. Por allí cae Henry Rollins y Wilson le endosa su primera demo para que la escuche. A los pocos días Henry le llama por teléfono y le muestra su admiración, de tal forma que en unas semanas el trío de convierte en la banda de acompañamiento del ex Black Flag.

Desde hace años Mother Superior funciona sin su mentor, autonomía que les trae a Gasteiz mañana (sala Helldorado) para presentar «Grande», un recopilatorio muy especial.